Los huertos urbanos se han convertido en una manera sustentable y eficaz de producir nuestros propios vegetales de autoconsumo. Plantas medicinales, ornamentales, hortalizas, aromáticas o frutales hacen parte de esta técnica ecológica que ayuda a crear conciencia ambiental y a reducir el consumismo, haciendo sustentable nuestra forma de vida.
Son muchos los beneficios que se obtienen al convertirnos en pequeños agricultores pues no solo estamos en contacto con la naturaleza sino que también contribuimos al cuidado del medio ambiente. Las terrazas, balcones y pequeños jardines son un buen lugar para el cultivo en macetas o materiales que se reciclan y se reutilizan como las botellas de plástico, alambres, vidrios, tubos de PVC, envases de aluminio, tiras de plástico, etc.
También con esta técnica evitamos encontrar vegetales y plantas que no sabemos si han sido tratados con productos químicos que afecten nuestra salud y nuestra economía. Estos huertos en casa requieren de muy poca manutención y estimulan la creatividad.
Existen muchos tipos de huertos urbanos:
Huerto vertical: es el más sencillo de montar, ya que ocupa menos espacio si tenemos una casa o apartamento.
Huertos de riego con regadera: consiste en regar el suelo orgánico con una regadera, en la cual se puede usar una botella de plástico para hacer esta técnica.
Huertos con riego hidropónico: se usan soluciones minerales en vez de suelo agrícola aprovechando el agua.
Huertos con riego por goteo: se entierra una botella con una pequeña abertura en el suelo agrícola.
Huertos de riego por exudación: es un sistema que consiste en colocar una manguera o tubo por todo el suelo y de forma continua se deja fluir el agua.
El cultivar nuestros propios alimentos sabiendo qué consumimos y cómo lo cosechamos, se ha convertido en una alternativa sostenible para la producción de verduras frescas. De hecho, la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo, dejó claro que una manera de erradicar el hambre en el mundo es pasar de una agricultura industrial a un modelo basado en el desarrollo rural donde la agricultura ecológica sea el protagonista.
Plantas pequeñas como los rábanos, zanahorias, cebollas, espinacas, tomates, pepinos, arvejas, lechugas y perejil, las podemos sembrar verticalmente cerca a la ventana. Plantas grandes como pimientos, berenjenas, coles y brócolis, los podemos sembrar en espacios de un metro cuadrado.
Manos a la obra para aprovechar al máximo cada espacio que nos rodea en nuestro entorno urbano.
Autor: Sandra Patricia Romero , Facilitadora EDC – Cundinamarca.
Editor: Katherine Vargas Gaitán, Periodista Editora. @KatheVargasg
Buenas tardes.
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