En Córdoba y Tolima se desarrolló el proyecto “Algodón, fibras del corazón” liderado por la empresa alemana Badische Anilin- und Soda-Fabrik – BASF, la cual se dedica a la producción de alternativas químicas para un futuro sustentable. Además de promover constantes soluciones para la agricultura.
Este programa es un modelo de negocio social integral, que logró reducir el costo de mano de obra en un 262%, gracias a la mayor eficiencia por tecnificación, así incrementó la productividad de los lotes pilotos en un 20%.
Pues incluyó planes de capacitación y transferencia de tecnología a pequeños algodoneros generó mayor conciencia en el modelo de cultivo, mejoró sus condiciones de vida e incrementó sus ingresos.
“En BASF estamos comprometidos con el desarrollo de Colombia. Por esto, una de nuestras grandes apuestas es el programa Algodón, fibras del corazón, una iniciativa que busca incentivar a los agricultores algodoneros en el país, a la vez que impulsamos el campo colombiano y la industria en general” explica Carolina Vargas, consultora de sostenibilidad y relaciones gubernamentales de BASF.
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Asimismo, la empresa hizo entrega de elementos de protección para la fumigación y otra variedad de instrumentos indispensables para el cuidado del agricultor en su trabajo del día a día. Adicionalmente, brindó una asesoría en el manejo adecuado del cultivo, a través de prácticas agrícolas.
Un informe realizado por las Naciones Unidas estima que 100 países producen algodón, siendo China, India y Estados Unidos los principales productores. Colombia, está en el puesto número 37 en producción y ocupa el puesto 10 a nivel continental.
El algodón es de importancia mundial, pues aproximadamente 350 millones de personas efectúan actividades con algodón y más de 100 millones de familias agricultoras se benefician del producto.
Por: Alejandro Vargas Ramos. Periodista.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.
