Guayatá se viste de flores, con su tradicional tapete del Corpus Christi, con el que en el año 2014 recibió el record Guinness al tapete de flores más largo del mundo.
Por Yoana Bastidas*
Para los católicos el Corpus Christi es la fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, de la presencia de Jesucristo en la Eucaristía. Este día se recuerda a la institución de la Eucaristía que se llevó a cabo el Jueves Santo durante la Última Cena; al convertir Jesús el pan y el vino en su Cuerpo y en su Sangre. Es una fiesta muy importante porque la Eucaristía es el centro de su fe.
Hace ya casi dos siglos, que se celebra tradicionalmente en Guayatá, Boyacá, el Corpus Christi, una ocasión en la que la comunidad se une entorno a una de sus más fuertes expresiones de fervor religioso. Todos los años el día domingo, 40 días después de la asunción, nos preparamos para vestir la alfombra de flores, que abarca el parque principal y algunas cuadras de más.
La tradición consiste en delinear las calles por donde pasa la procesión con flores amarillas y completar el cuadro con figuras alegóricas al día como cálices, hostias y copas, creados con flores de hermoso colores.
Todos sin distinción se unen para crear un hermoso tapete compuesto por miles de flores, un vínculo que une al pueblo que a través de los símbolos reconoce su origen y refuerza su fe para permanecer unido como familia.
Es una oportunidad de recordar su historia, como una forma de fortalecer los lazos y romper las barreras sociales, económicas, ideológicas, raciales, de género y edad; para reconocerse como hermanos.
Es una ocasión para fortalecer las relaciones de reciprocidad, solidaridad, entrega mutua y para compartir la comida y la palabra unidos en comunión entorno a las profundas creencias.
Que bonito