En el marco del proyecto Pescado para el Desarrollo, implementado en 8 instituciones educativas rurales de Caquetá, se están llevando a cabo convivencias con acompañamiento de la Diócesis de San Vicente del Caguán para que las y los jóvenes beneficiarios tengan un espacio de encuentro de saberes.
Entre las personas que apoyan este proceso se encuentra Andrés Ducuara, quién es licenciado en informática y cuenta con una especialización en pedagogía. “Mi recorrido como docente ha estado la mayor parte acá en el Caquetá, amo sus paisajes, su gente y siento una vocación por trabajar por este territorio, un departamento marcado por diversos conflictos pero siempre creyendo que son más las personas que se proyectan a la paz y a una sana convivencia”.
¿Cuál es el objetivo de las convivencias que se están realizando en las instituciones educativas?
“La convivencia busca abordar y reforzar los valores desde el saber hablar, saber escuchar y vivenciar herramientas para la resolución de conflictos. La idea es resaltar los valores que necesitamos para una convivencia pacífica y lograr que los jóvenes aprendan a llevarse bien desde buenos modales y prácticas de paz”.
¿Cuál ha sido el rol de la Diócesis de San Vicente del Caguán en el territorio?
“La importancia de la Diócesis ha sido grande porque a través de los proyectos ha llegado hasta las regiones más alejadas de la cabecera urbana para proyectar enseñanzas y perspectivas de futuro en las personas que han vivido diversas dificultades e inconvenientes. Esto se ha logrado sobre todo en aspectos de educación, brindando oportunidades y posibilidades para poder llevar a cabo proyectos de vida individuales y comunitarios.
¿Algún mensaje para los 300 estudiantes que participan del proyecto?
“Mi mensaje es que sigan participando y contribuyendo en todo este proceso, son jóvenes afortunados. Son muchos los jóvenes en busca de una oportunidad para salir adelante y aprender, estos proyectos dejan muchas enseñanzas e instalan capacidades en la región. Mi invitación es que sigan participando y valoren esta gran oportunidad que se les está presentando en sus vidas”.
Por: Sebastián Ríos Buitrago. Facilitador educativo del proyecto Pescado para el Desarrollo.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.