Café Orgánico una alternativa para cuidar la salud y el medio ambiente.
Por Nidian Yoana Bastidas
El café orgánico pertenece a la familia de las rubiáceas, al género coffea, que comprende alrededor de 60 especies, de las cuales dos son las más cultivadas: arábica y cenephora (comúnmente conocida como robusta), crece como arbusto bajo el entramado de las selvas tropicales.
El café orgánico es el tipo de café producido sin la ayuda de sustancias químicas artificiales, se siembra a la sombra de otro tipo de árboles de mayor altura, lo cual proporciona humedad. Con este proceso se busca contribuir a mejorar el suelo para que sea más fértil. Las propiedades del café orgánico, suman a los beneficios que el café convencional por sus características ecológicas. El café orgánico está libre de pesticidas y fertilizantes, por lo que no expone al organismo a los efectos adversos de estos.
El café orgánico difiere del convencional, desde el cuidado del cultivo; su proceso productivo comienza desde que los caficultores realizan el proceso de recolección y selección en sus fincas y se termina cuando el comercializador tiene el café pergamino seco listo en sus bodegas para ser exportado. El consumo de café orgánico es un alimento saludable y ayuda a la conservación del medio ambiente.
Para obtener un buen café orgánico se debe tener en cuenta el abonamiento de cada parcela debe hacerse con el compost, este es producido por los propios agricultores. El terreno se deberá limpiar cuidando el no dañar los arboles de sombra y así asegurar una sombra adecuada del cultivo. La cantidad de luz, disponibilidad de agua, poco viento o con barreras naturales. Con el auge de la conciencia por la preservación medioambiental y la salud, más y más gente busca la etiqueta “orgánico” en los productos que compra ya que se sabe se preocupa por el medio ambiente y por la salud.