Según informa la Asociación Nacional de Comercio Exterior – Analdex, en el 2016 la gulupa fue la cuarta fruta más exportada de Colombia. Además, el principal destino de los envíos de gulupa es Países Bajos, con una participación del 86,8% del total de la fruta exportada.
Así mismo, se ha demostrado una creciente producción de la gulupa en la nación. Por tal motivo, ha aportado económicamente al país con ingresos de 10 a 25 millones de dólares, entre 2010 y 2017; así lo asegura el profesor John Ocampo, del grupo de investigación en Recursos Fitogenéticos Neotropicales de la Universidad Nacional –U.N., en el portal de noticias de la universidad. Le puede interesar: Usos y beneficios de la gulupa
Ocampo propone la gulupa como una fruta que favorece al agricultor por su rentabilidad; pues, desde el momento en que se cultiva: a los ocho meses ya empieza a producir frutos. Además, explica para la U.N. “si se invierten 50 millones de pesos en una hectárea, en tres años el cultivo puede generar ganancias que dupliquen el valor de ese primer gasto.”
¿Exportación de gulupa, un negocio rentable?
Según afirma el profesor, la gulupa es una fruta costosa para la venta dentro del país. A un productor de esta fruta se le pagan entre 3.800 y 4.200 pesos colombianos por un kilo de gulupa. Mientras que a países como Holanda, Alemania y Francia, la unidad puede venderse a 5.100 pesos colombianos, en promedio. Por tal motivo el 90% de lo producido se exporta a esos países de Europa.
“Con 800 hectáreas sembradas, Colombia es el mayor exportador del mundo, razón por la cual el investigador de la U.N., teme que aumentar la cantidad de cultivos llegaría a generar una sobreoferta que disminuiría los precios y, por ende, la rentabilidad para pequeños productores.” Tal como se informa en el portal de noticias.
Cultivos de gulupa que promueven el cambio social
El profesor aconseja primero: evaluar el estudio de mercado para determinar así después, cómo se puede avanzar con la gulupa antes de empezar con la sustitución de cultivos ilícitos. Le puede interesar: Frutas exóticas se acrecientan más en las exportaciones
Aun así, el hecho de sustituir los cultivos ilícitos por plantaciones de gulupa es una excelente alternativa para la construcción del tejido social; puesto que beneficia a los habitantes rurales de las regiones que han sido marcadas por la violencia, aumentando económicamente sus ingresos para suplir sus necesidades.
Por otra parte, el profesor insiste en fortalecer el consumo interno de esta fruta; además, ha identificado que algunos productos que no cumplen con los estándares para ser exportados; se quedan en el país y se pueden aprovechar para utilizarlas en jugos, postres y cocteles.
Según la U.N en su portal, la cáscara de la gulupa se puede manipular para producir harinas; además de las semillas, se puede generar aceites como materia prima para industrias cosméticas. Y, también la flor tendría un valor como planta ornamental.
Por: Andrés Arias. Estudiante de Comunicación Social – Periodismo.
Editor: Lina María Serna.