La pedagogía para la paz uno de los retos del gobierno colombiano luego de firmar los acuerdos en La Habana. Mientras tanto, La Guajira se prepara para elecciones atípicas y el plebiscito
Por: Érika Correa, facilitadora EDC- La Guajira
La pedagogía para la paz es más que necesaria luego de firmados los acuerdos. Será vital para que los ciudadanos conozcamos el significado y los alcances de dichos acuerdos, y así ser responsables de nuestra decisión en el plebiscito por la paz.
Es indispensable implementar una campaña pedagógica ciudadana. Una pedagogía para la paz debe existir para que la comunidad colombiana comprenda la dimensión del proceso de paz y sus efectos, y se traten cada uno de los puntos del acuerdo:
- Políticas de desarrollo agrario integral
- Participación política
- Solución del conflicto de las drogas ilícitas
- Victimas e implementación
- Verificación y refrendación del proceso
Con la pedagogía para la paz, los ciudadanos debemos ser conscientes de que los acuerdos solo podrán prosperar con la movilización ciudadana, puesto que el proceso de paz es un tema que le compete a todos. No es el fin del conflicto entre el cuerpo dirigente del Estado y un grupo guerrillero, es el fin del horror y terror que han vivido miles de familias a lo largo y ancho de nuestra amada Colombia. Es dar el paso total, entender que en un conflicto es mejor la paz que la guerra, más que un llamado a la pedagogía para la paz.
Sin duda el departamento que tendrá que enfrentar la mayor presión sobre las elecciones del 2 de octubre es La Guajira. Sus habitantes no solo tendremos que decidir sobre el futuro de los Acuerdos de Paz, sino sobre el gobernador que remplazará a Oneida Pinto. Por eso es que aquí hay la necesidad de una pedagogía para la paz. Las elecciones atípicas que se llevarán a cabo el 30 de octubre ponen en la mesa la posibilidad de enfrentar dos campañas en una. Es un reto que se podrá afrontar con una buena y objetiva pedagogía para la paz.
A los graves problemas de pobreza, desnutrición, corrupción y falta de comunicación entre las instituciones centrales y el gobierno local; se suma este nuevo reto. Los guajiros tendremos que enfrentarlo en medio de la fuerza que traerán las campañas por el “Sí” y por el “No” al plebiscito. Más que un reto será que quienes lideran la mafia del poder en nuestro territorio intenten no manipular y enredar ambas cosas e involucren y desvíen los objetivos de la pedagogía para la paz.
Sin duda alguna es imprescindible que se inicie lo más pronto posible una pedagogía para la paz y se aclare todo sobre lo acordado en La Habana, para desvirtuar a quienes están dedicados a tergiversar lo convenido.
*Este es un texto generado a partir del trabajo de las Escuelas Digitales Campesinas de Acción Cultural Popular- ACPO, que buscan promover el liderazgo del campesinado colombiano a través de procesos de educación, formación y capacitación, orientados a su dignificación, inclusión y desarrollo.