Los maestros de La Guajira nuevamente hacen paro en busca de que los servicios de salud mejoren.
Por: Érika Correa, facilitadora EDC- La Guajira
La Guajira es uno de los departamentos con más problemas en materia de salud para el magisterio. El tema hace parte de los objetivos del paro departamental de 48 horas que que se realizó el 17 y 18 de agosto. Por ello, el magisterio guajiro se declaró en alerta amarilla por la problemática de la salud. Algunos dirigentes aseguran: “estamos luchando por la vida, la salud”.
Representantes señalan que la situación es crítica, porque ha tocado al mismo cuerpo de facultativos y en la actualidad han renunciado médicos generales y especialistas, ha habido cierre de atención al usuario en clínicas alternas y las remisiones fuera del departamento son un caos.
Los dirigentes y representantes de los docentes en cada municipio se trasladaron a la capital de La Guajira, en donde desde un punto de concentración se inició un recorrido hasta la gobernación del departamento. En cada municipio se establecieron puntos de encuentro para realizar caminatas por calles principales hasta el Palacio Municipal para protestar en frente de cada Secretaria de Educación.
Como las auditorías son inútiles y los comités regionales se limitan a las quejas en el sector salud, se espera que con el paro se determinen medidas que sí den resultados efectivos y a corto plazo, pues se necesitan con urgencia, para preservar la vida.
Los maestros esperan que se establezcan los acuerdos y las medidas necesarias por los entes encargados de la salud en todo el departamento, para que se pueda gozar de un servicio digno y pertinente.
La mala prestación del servicio de salud al sector educativo en La Guajira, y los no acuerdos al respecto estarían motivando a un paro indefinido por parte de los docentes en el departamento, con el fin de exigir mayores garantías en cuanto a salud.
*Este es un texto generado a partir del trabajo de las Escuelas Digitales Campesinas de Acción Cultural Popular- ACPO, que buscan promover el liderazgo del campesinado colombiano a través de procesos de educación, formación y capacitación, orientados a su dignificación, inclusión y desarrollo.
