Medalla de San Benito es un sacramental* reconocido por la Iglesia con gran poder contra el mal. Como todo sacramental, su poder está no en si mismo sino en Cristo quien lo otorga a la Iglesia y por la fervorosa disposición de quién usa la medalla.
Por: Fabián Camilo Herrera
Origen
El origen de esta medalla se fundamenta en la experiencia espiritual que aparece en la vida de san Benito, descrita por el Papa san Gregorio. San Benito usó con frecuencia el signo de la cruz como signo de salvación, de verdad, y purificación de los sentidos, tanto así, que un día quebró un vaso que le habían dando y que contenía veneno, con la sola señal de la cruz hecha sobre él.
Cuando los monjes fueron perturbados por el maligno, el santo mandó que hicieran la señal de la cruz sobre sus corazones, y era también la cruz la firma de los monjes en la carta de su profesión cuando no sabían escribir.
Sin embargo, la medalla tal como se conoce hoy, se puede remontar al siglo XII o XIV o quizá a una época anterior. En el siglo XVII, en Nattenberg -Baviera-, en un proceso contra unas mujeres acusadas de brujería, ellas reconocieron que nunca habían podido influir malignamente contra el monasterio benedictino de Metten porque estaba protegido por una cruz.
Hechas, con curiosidad, investigaciones sobre esa cruz, se encontró que en las tapias del monasterio se hallaban pintadas varias cruces con unas siglas misteriosas que no supieron descifrar. Continuando la investigación entre los códices de la antigua biblioteca del monasterio, se encontró la clave de las misteriosas siglas en un libro miniado del siglo XIV.
En efecto, entre las figuras aparecía una de san Benito alzando en su mano derecha una cruz que contenía parte del texto que se encontraba sólo en sus letras iniciales en las astas cruzadas de las cruces pintadas en las tapias del monasterio de Metten, y en la izquierda portaba una banderola con la continuación del texto que completaba toda
s las siglas hasta aquel momento misteriosas.
Mucho más tarde, ya en el siglo XX, se encontró otro dibujo en un manuscrito del monasterio de Wolfenbüttel representando a un monje que se defiende del mal, simbolizado en una mujer con una copa llena de todas las seducciones del mundo. El monje levanta contra ella una cruz que contenía la parte final del texto consabido. Es posible que la existencia de tal creencia religiosa no sea fruto del siglo XIV sino muy anterior.
Benedicto XIV, en marzo de 1742, aprobó el uso de la medalla que había sido tachada anteriormente, por algunos, de superstición. Dom Gueranger, liturgista y fundador de la Concregación Benedictina de Solesmes, comentó que el hecho de aparecer la figura de san Benito con la santa Cruz, confirma la fuerza que su signo obtuvo en sus manos. La devoción de los fieles y las muchas gracias obtenidas por ella es la mejor muestra de su auténtico valor cristiano.
Explicación de la Medalla
Anverso:
En las antiguas medallas aparece, rodeando la figura del santo, este texto latino en frase entera: Eius in óbitu nostro preséntia muniámur. «Que a la hora de nuestra muerte, nos proteja tu presencia».
Reverso:
El reverso muestra la cruz de San Benito con las letras:
C.S.P.B.: «Santa Cruz del Padre Benito»
C.S.S.M.L. : «La santa Cruz sea mi luz» (crucero vertical de la cruz)
N.D.S.M.D.: «y que el Dragón no sea mi guía.» (crucero horizontal)
En círculo, comenzando por arriba hacia la derecha:
V.R.S. «Abajo contigo Satanás»
N.S.M.V. «para de atraerme con tus mentiras»
S.M.Q.L. «Venenosa es tu carnada»
I.V.B. «Trágatela tu mismo».
PAX «Paz»
*Se llaman sacramentales los signos sagrados instituidos por la Iglesia cuyo fin es preparar a los hombres para recibir el fruto de los sacramentos y santificar las diversas circunstancias de la vida. Catecismo de la Iglesia Católica.
Fuente: http://www.abadiadesilos.es/medalla.htm