El 26 de abril de 1986 la entonces Unión Soviética vivió una emergencia de proporciones nunca antes vistas, lo que fue la ciudad modelo de la URSS, acabó siendo evacuada en menos de seis horas para nunca más volver a la normalidad.
Por: ElCampesino.co
El reloj ubicado en la plaza central de Prypiat marcaba la 1:30 de la tarde del 26 de abril, aquella ciudad por entonces cumplía 15 años de fundación, fue concebida por el Partido Comunista como la ciudad modelo de lo que debería ser la Rusia del futuro. Allí vivían 40 mil personas atraídas por el trabajo que generaba la central nuclear Vladimir IlIch Lennin.
Después de Moscú, Pryipiat tenía los mejores centros de abastos y en general ostentaba un nivel de vida idílico para los obreros de la planta nuclear más poderosa y la URSS. Al medio día los ingenieros de la central realizaban pruebas en el reactor número 4. La idea era poder obtener energía aun cuando el reactor funcionará a su mínima capacidad, a la 1:30 y cuando se intento devolver la capacidad al reactor, este falló y estalló. El cofre donde estaba el material radioactivo voló por los aires liberando 500 veces más radiación que la bombas nucleares utilizadas por USA en Japón.
Los empleados que estaban en la central murieron casi de inmediato por la exposición a la radiación, el sabor a metal en la boca fue la señal inequívoca de la emergencia. Ese fin de semana los habitantes de Prypiat no supieron mayor cosa, siguieron con su vida, pero lo que no sabían era que cada cosa y cada partícula a su alrededor estaba contaminada.
Miles de soldados fueron enviados a la central, se les llamo bio robots, su tarea era construir un cofre de metal que resguardara el hueco de la explosión y detuviera la liberación de radiación al aire, en el lugar solo podían estar un minuto, algo así como dos paladas de tierra y de inmediato debían irse. Diez días después de la explosión, Prypiat fue evacuado, las 40 mil personas jamás podrían regresar a sus hogares, la ciudad nunca más podrá ser habitada.