Huertas hidropónicas, una alternativa para producir alimentos

Nos hablan de las heladas de enero y de las sequías en febrero. Venimos de un fuerte fenómeno de La Niña que acabó con la producción agrícola de más de un campesino. Los tiempos están cambiando y la producción de alimentos siempre ha dependido de las condiciones climáticas.

Una buena alternativa para enfrentar la escasez de alimentos y tener autonomía alimentaria son las huertas hidropónicas caseras. Acá te contamos por qué son importantes y sobre todo fáciles de mantener.

Muchas poblaciones colombianas han estado en riesgo debido a la baja producción de alimentos. Por ejemplo, en la Región Caribe, debido a las fuertes inundaciones en las zonas bajas y el exceso de agua en las zonas altas, las parcelas cultivadas se perdieron por completo.

Las comunidades más vulnerables son las que más padecen estas pérdidas, poniendo en riesgo la buena alimentación y la soberanía alimentaria de todas las personas. Por esta razón, se idearon una estrategia para generar alimentos de manera rápida, económica y sostenible.

La respuesta fue introducir huertas hidropónicas en los lugares más afectados. De hecho, la Agencia Nacional de Tierras entregó recientemente una huerta en la Alta Guajira, para apoyar la soberanía alimentaria de esta región tan golpeada por la escasez de alimentos.

Las huertas hidropónicas permiten producir alimentos en espacios reducidos usando poca agua, y a menudo con materiales reciclados. Además, según la FAO, también pueden ser una fuente importante de ingresos familiares o un generador de redes de trabajo comunitario.

El proceso de cultivo se hace a partir de otros materiales, diferentes a la tierra. Por eso se denominan hidropónicos. Lo ideal es instalarlo en lugares aireados, abiertos o donde entré buena luz del sol.

Son una buena alternativa para que las personas de la tercera edad y los niños se sientan activos en los procesos productivos. Lo importante es que son una actividad que no requiere mucho tiempo, permitiendo a las personas que trabajan todo el día o no pueden dedicarse a cultivar, obtener sus propias hortalizas invirtiendo poco tiempo y dinero.