La Fiscalía General de la Nación, en cabeza del recién electo Néstor Humberto Martínez, envió una carta pidiendo evaluar la reinstauración de la fumigación de cultivos ilícitos con el controversial químico glifosato.
En la misiva, dirigida al Ministro de Justicia y presidente de Consejo Nacional de Estupefacientes Jorge Eduardo Londoño, solicita realizar una reunión extraordinaria para evaluar el posible regreso de la fumigación con glifosato para acabar con los cultivos ilícitos. Este ha sido considerado un movimiento político del Fiscal para mostrar independencia frente a la Presidencia, que había sido clave para la prohibición del uso de este químico.
En el comunicado se expresa preocupación por el aumento de cultivos de coca en el país. Según este, desde el 2012 las hectáreas de coca cultivada se han aumento en un 39%, pasando de 47.778 a 96.084 hectáreas en la actualidad. Así mismo, hizo un llamado para que la persecución a los cultivadores sea más efectiva y así dar cumplimiento a la 67 de 1993 de la Convención de las Naciones Unidas contra el tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias sicotrópicas. El país está suscrito a esta legislación que busca erradicar cualquier tipo de cultivo que contenga drogas ilegales.
Por otra parte, a través del comunicado el fiscal pone en duda la eficiencia de la política de erradicación manual, pues indica que no se puede controlar exactamente cuántas hectáreas han sido erradicadas debido a la falta de un registro eficiente. También expone que se han presentado 345 protestas y bloqueos por parte de la población campesina para evitar la erradicación, lo que conlleva a que sea mucho más lento el proceso. Suma a esto el peligro al que se exponen los erradicadores cuando van a hacer su labor, especialmente por las minas antipersona que todavía están plantadas en los campos colombianos.
A esta solicitud el jefe de Ministerio de Justicia, respondió que, si bien es importante la preocupación por parte de la Fiscalía en estos temas, se debe buscar un programa de erradicación integral. Hay que lograr la eliminación de los cultivos ilícitos, pero también cuidar la salud de los pobladores y su desarrollo.
El retiro del programa de fumigación fue aprobado siguiendo recomendaciones dadas por la Organización Mundial de la Salud, la cuales alertan por la posibilidad de enfermedades cancerígenas que puede provocar el glifosato. El ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, rechazó con vehemencia la propuesta del fiscal. El químico ha sido extensamente prohibido alrededor del mundo, con una restricción completa de su uso en la Unión Europea.