Boyacá produce café de muy buena calidad. Esta actividad contribuye al desarrollo socioeconómico del campesinado valletenzano.
Por: Nidian Yoana Bastidas Alba
Facilitadora de las EDC de Boyacá
El café siempre ha estado presente en las expresiones de nuestra vida. Ha sido la bebida solidaria del amor o del desamor, de la alegría o del dolor, de la amistad o de la soledad.
Uno de los placeres más grandes de la vida es saborear un café. No importa si usted es novato o conocedor del café, seguramente podrá apreciar el rico aroma y el fino sabor de una taza de café colombiano.
En Boyacá se cultiva café y de muy buena calidad. El café boyacense, en su gran mayoría, es tipo exportación. El clima, las tierras y las condiciones geográficas son las apropiadas en esta parte del territorio boyacense, más exactamente en el Valle de Tenza.
En su mayoría de municipios cuenta con una Asociación de Productores que, siguiendo los lineamientos técnicos y Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), poseen una actividad agrícola que favorece la calidad de vida de los campesinos asociados.
Cada caficultor fue formado desde pequeño en escoger, tostar y moler el café de la finca de sus padres a su propio gusto. Ahora extienden su conocimiento y lo fortalecen a través de las capacitaciones que reciben a través de asistencia técnica en cada una de sus fincas con el propósito de lograr café de calidad. La meta es consolidar el Valle de Tenza en Boyacá como productor de café especial.
Se quiere que Colombia y el mundo sepan que Boyacá también produce café y café 100% orgánico de máxima pureza, excelente calidad y único en sabor, contribuyendo al desarrollo socioeconómico del campesinado valletenzano.