La Amazonía es la región de bosque tropical más grande del planeta con un total de 6,9 millones de kilómetros cuadrados, siendo el hogar de miles de especies de fauna y flora que cohabitan con los saberes y cosmovisiones ancestrales de diversos pueblos indígenas. De acuerdo con Greenpeace, desde 1970 se ha perdido solo en Brasil una superficie forestal más grande que toda Francia, y una de las principales causas es la ganadería.
En este paraíso natural conocido como el pulmón del planeta, se encuentra el igapó, un bosque típico de esta región que permanece inundado la mayor parte del año, diferenciándose de los bosques de tierra firme y los de llanura aluvial. Razón por la que los animales que viven allí desarrollan un estilo de vida arbóreo y semiacuático, y la vegetación también es específica.
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Son las aguas del río Amazonas y sus afluentes las que llegan hasta este ecosistema alcanzando hasta 10 metros de profundidad entre diciembre y junio, permitiendo a las comunidades predecir el ciclo anual de lluvias y por ende la situación del igapó. Sin embargo, el cambio climático y las malas prácticas humanas como la minería, la deforestación, las represas hidroeléctricas, representan una latente amenaza para esta cuenca hidrográfica.
¿Qué especies habitan en el igapó?
Con registro de más de 800 años resalta el coco de mono, un árbol de humedal que soporta hasta 9 metros bajo el agua, en el que permanece el perezoso de dos dedos que además de ser un excelente nadador, es uno de los mamíferos del igapó que mejor ha evolucionado para el consumo de hojas. Este comparte alimento con el mono ardilla común, que se reúne en grupos de 20 a 50 individuos.
En cuanto a aves acuáticas se encuentra la aninga americana, que durante épocas de inundación aprovecha para atrapar a su presa y bucear, por su parte, los guacamayos utilizan este ecosistema para pasar la noche y alimentarse, sobretodo de las semillas de palma que son su comida favorita.
En las áreas más inundables se puede visualizar el jaguar, que adopta un comportamiento peculiar y pasa hasta un tercio de su vida en la copa de los árboles y desde allí caza y se reproduce. También, se encuentra el delfín rosado, una de las especies más simbólicas para la cultura popular ribereña.
Por: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.
