Al pensar en pequeñas y olvidadas poblaciones del altiplano cundiboyacense, las imágenes se remiten a sembrados de papa, maíz y una que otra vaca pastando en esos verdes y extensos paisajes.
Por: ElCampesino.co
También, y no sé si sea para agradecer o no, el deterioro de las vías y el difícil acceso a muchas de las veredas hacen que los campesinos tengan como única opción el transporte en bicicleta, entonces desde muy niños nuestros campesinos hacen largas jornadas pedaleando y muchos de ellos sin ser conscientes en realidad están es preparándose para un mejor futuro.
Entonces, para muchos ya en la adolescencia y sin descarriarse por el camino de la Pola, muchos deciden dedicarse a entrenar diariamente ya no llevando mandados o transportando cantinas de leche, la meta es llegar a ser vistos por algún caza talentos que pueda estar en la región y que posiblemente los pueda llevar a competir fuera del país.
Desafortunadamente la tradicional Vuelta a Colombia ha perdido mucho protagonismo y ya no se ve como una opción para que equipos de tradición a nivel mundial vengan con sus mejores ciclistas, otra carrera que ha perdido bastante es el clásico RCN y es una lástima pues para muchos era una ayuda más para lograr algún reconocimiento.
Coldeportes, aun que invierte en temas de competencia no parece tener los recursos suficientes para organizar escuelas, semilleros o sitios adecuados para entrenamiento y competencia, ya lo vimos en los pasados juegos nacionales donde el departamento del Tolima no alcanzo a tener las instalaciones listas para la fecha.
Nuestros deportistas campesinos no deben estar entrenando en vías deterioradas o caminos de vereda cargando cantinas de leche, deben estar dedicados a entrenar en serio y no estar sufriendo por cómo ayudar en sus casas o como intentar estudiar algo que pueda ayudarles en el futuro, y aun mucho menos estar pensando en comprar una moto para ya no tener que hacer las vueltas en la bicicleta.
Ha sido de mucho mérito y una alegría para el país encontrar tantos ciclistas, pesistas, patinadores y corredores provenientes de campo, que de alguna forma hacen ver al país de una forma distinta en el exterior, por fortuna el narcotráfico no alcanzo a meterse de lleno en este deporte y no dañó su imagen con sobornos o lavados de dinero.
Colombia parece ser uno de esos pocos países donde nada es motivado por nadie, el que sale adelante en realidad es por amor a su oficio o por haber encontrado el talento en algo que no estaba buscando y logra enfrentarse a la vida de una manera digna, hay que felicitar e incentivar a nuestros campesinos para que sigan adelante buscando la gloria a través del deporte y que de alguna forma ellos mismos más adelante fomenten en las nuevas generaciones el amor al deporte como una opción de vida.