Las consecuencias del cambio climático son cada vez más visibles, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas – ONU, en la última década la temperatura mundial ha aumentado 1,2 grados centígrados, cerca de 9,6 billones de toneladas de hielo se han perdido de los glaciares, más de 24.000 millones de toneladas de tierra están infértiles o sufren de erosión, y hay aproximadamente 5.200 especies en vía de extinción.
Reconociendo la importancia de tomar acciones que incluyan activamente a las comunidades para la mitigación del cambio climático, el pasado 27 de mayo del 2021 la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura – FAO realizó el Seminario de Alto Nivel de Expertos Sobre Impactos Del Cambio Climático: ampliando situaciones de vulnerabilidad en pueblos indígenas, poblaciones afrodescendientes y migrantes latinoamericanos.
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El evento tuvo como objetivo debatir sobre la necesidad de reconocer los saberes ancestrales de las comunidades indígenas y afrodescendientes, pues de acuerdo con la FAO estas poblaciones salvaguardan el 80% de la biodiversidad mundial. Sin embargo, estas valiosas contribuciones rara vez se reflejan en las estrategias de mitigación y las políticas de adaptación por parte de los Gobiernos para abordar el cambio climático y los sistemas agroalimentarios.
Anne Nuorgam, presidente del Foro para las Cuestiones Indígenas de la ONU y miembro de la comunidad indígena Sami de Finlandia, relató un discurso en calidad de oradora principal, en el cual hizo énfasis en que los pueblos indígenas no son vulnerables, pues a pesar de enfrentarse a retos como el hambre, la malnutrición y la pobreza han preservado sus sistemas alimentarios y de conocimiento durante siglos.
Así mismo, explicó que el cambio climático es una situación que le concierne a todas las personas, en particular a los pueblos indígenas, afrodescendientes y migrantes. “Una cuestión que nos une a todos es la tierra, el cambio climático está poniendo en riesgo la supervivencia cultural y física de los pueblos indígenas en todo el mundo, debido a que dependemos directamente de la tierra y los recursos naturales”, afirmó Nuorgam.
También, indicó que las consecuencias de la crisis ambiental han hecho que muchas comunidades tengan que abandonar sus territorios, obligándolos a desplazarse forzosamente a las grandes ciudades. Esto implica que se enfrenten a nuevos desafíos como la perdida de tierra, de recursos, la discriminación y el desempleo.
Por su parte, la vicepresidente de Costa Rica, Emsy Campbell Bar abordó la necesidad de implementar programas o estrategias como el pago por servicios ambientales, en función de las comunidades indígenas y afrodescendientes que no solo reconozcan los saberes ancestrales de conservación, sino que tengan un enfoque de género.
En ese sentido destacó que desde el Gobierno de Costa Rica adelantan 2 estrategias que pretenden aumentar la cobertura forestal del país de la mano de 8 comunidades.
Otra intervención que destacó en el debate, fue la de Myrna Cunningham, presidente del Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y El Caribe – FILAC, quien manifestó que hacerle frente a la crisis ambiental no es posible si no se incluye a las comunidades indígenas.
“Es esencial que los derechos y los saberes de los pueblos indígenas se prioricen, día a día vemos el efecto de estas crisis en nuestros territorios, no se puede hablar de estos temas sin nuestra participación porque seguimos siendo líderes en la implementación de estrategias de adaptación, conservación y reforestación” aseguró Cunningham.
Cabe mencionar que, en evento participaron más de 300 personas, entre los que sobresalieron QU Dongyu, presidente general de la FAO; Carmen Calvo, vicepresidenta de España y Alexis Neuberg, presidente de la Plataforma de Desarrollo de la Diáspora África-Europa (ADEPT, por sus siglas en inglés).
Por: Ivania Alejandra Aroca Gaona. Periodista.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.