En un país donde el campo es la piedra angular de su identidad y economía, las mujeres campesinas han sido la columna vertebral de la vida rural en Colombia. Su contribución ha sido vital para el desarrollo y la sostenibilidad de las comunidades agrícolas a lo largo de los años. En el Día Internacional de la Mujer, es imperativo reconocer su incansable trabajo y su papel fundamental en la construcción de un futuro próspero y equitativo para todos los colombianos.
Las mujeres campesinas desempeñan múltiples roles dentro de las comunidades rurales de Colombia. Desde la producción de alimentos hasta la conservación de las tradiciones culturales y el cuidado de la familia, su labor abarca una amplia gama de actividades que son esenciales para el bienestar y la estabilidad de las zonas rurales del país.
Una de las áreas en las que las mujeres campesinas destacan es en la agricultura. A pesar de enfrentar numerosos desafíos, como la falta de acceso a tierras, recursos y educación, estas mujeres han demostrado una notable habilidad para cultivar y cosechar alimentos, contribuyendo así a la seguridad alimentaria de Colombia. Además, su conocimiento tradicional sobre prácticas agrícolas sostenibles ha sido fundamental para la conservación del medio ambiente y la biodiversidad en el campo colombiano.
Así mismo, mientras la comunidad mundial procura alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) −entre ellos, el ODS 2, cuyo propósito es poner fin al hambre y la malnutrición a más tardar en 2030− las mujeres pueden convertirse en los agentes del cambio fundamentales en los ámbitos de la agricultura, la nutrición y el desarrollo rural. Con un mejor acceso a la información, la capacitación y la tecnología, ellas pueden transformar la producción y el consumo de alimentos para que la tierra y los recursos se utilicen de manera sostenible.
La distribución demográfica en las zonas rurales de Colombia refleja la importancia de las mujeres en el campo. Según datos del DANE año 2022, el 48.2% de la población rural son mujeres, lo que equivale a aproximadamente 5.9 millones de personas. Esta significativa presencia femenina en el campo resalta la importancia de empoderar y apoyar a las mujeres campesinas para garantizar un desarrollo rural inclusivo y sostenible en el país.
En este Día Internacional de la Mujer, es fundamental reconocer y valorar la labor de las mujeres campesinas en Colombia. Su dedicación, resiliencia y habilidades han sido fundamentales para el progreso y la prosperidad de las comunidades rurales en todo el país. Es hora de seguir apoyando y empoderando a las mujeres en el campo, garantizando que tengan acceso a oportunidades y recursos necesarios para prosperar y alcanzar su máximo potencial. Al honrar el legado de las mujeres campesinas, estamos construyendo un futuro más justo, inclusivo y sostenible para todos los colombianos.