Maryin Yajaira es una mujer trabajadora, se destaca por su compromiso en las actividades que se llevan a cabo en el centro poblado Héctor Ramírez en la vereda Agua Bonita. Actualmente, ella es participante del proyecto Mujer Mestiza, Indígena y Afrodescendiente – MIA, un proyecto para el desarrollo de la mujer en proceso de reincorporación. También es miembro de la Asociación de Mujeres AZMUPROPAZ donde trabajan en género, primera infancia y medio ambiente.
Una mujer que ha emprendido a través de la creación de accesorios artesanales como aretes, pulseras, collares, llaveros, entre otros elementos. Certificada por el SENA donde fortaleció sus habilidades en la creación de artesanías; sueño y meta es consolidar una tienda en la que pueda mostrar y vender estas hermosas creaciones.
Para Maryin en este tiempo de pandemia es importante visibilizar el trabajo de su comunidad, pues en el país existe un estigma sobre las comunidades en proceso de reincorporación. Por esto a partir de su emprendimiento y compromiso por estudiar, quiere demostrar que estas poblaciones están comprometidas por cumplir con lo pactado y aportar a la sociedad.
Cabe resaltar que, estos conocimientos en creaciones artesanales son compartidos con sus compañeras para motivarlas a fortalecer sus habilidades y que puedan generar ingresos a futuro desde estas enseñanzas. Su idea de negocio podría llegar a generar muchos empleos para más mujeres de su comunidad, pero requiere de apoyo para poder avanzar.
Gracias al proyecto MIA también se certificó en las Escuelas Digitales Campesinas – EDC en Asociatividad y Emprendimiento, Alfabetización Digital, Mi Proyecto de Vida en el Campo, Liderazgo en la Comunidad Rural y Comunicación y Periodismo Rural.
Maryin también se encuentra en las formaciones de los talleres de comunicación del proyecto, donde recibe conocimientos que pueden ayudar a la visibilidad de su emprendimiento y el trabajo en general en temas productivos que realiza su comunidad.
Se ha logrado visibilizar todo lo que ha implicado el impacto del aprendizaje para seguir narrando historias de paz en el departamento del Caquetá, como símbolo de experiencias de la construcción de una paz territorial estable y duradera.
Estas actividades se han implementado gracias al proceso de reincorporación dentro de los Acuerdos de Paz, donde recursos internacionales se han invertido para que estas comunidades puedan formarse, trabajar y aportar al desarrollo de hombres y mujeres que dejaron las armas para construir paz. Estas comunidades hoy cuentan con enfermeras, maestros, artesanos, comunicadores, técnicos agropecuarios, entre otras profesiones.
De esta manera, desde el proyecto MIA con apoyo de las comunidades, se informa sobre el esfuerzo y compromiso de esta población rural en Caquetá.
Por: Anyela Cardozo. Facilitadora educativa del proyecto MIA en Caquetá.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.