La fracturación hidráulica, más conocida como fracking, es una técnica utilizada para la extracción de combustibles fósiles. Dicho proceso tiene un impacto ambiental negativo ya que crea un desequilibrio ecológico y contamina las fuentes hídricas.
A inicios del año 2022 la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales – ANLA autorizó el piloto de fracking Kalé de Ecopetrol, que pretende intervenir en el municipio de Puerto Wilches, Santander.
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Teniendo en cuenta los posibles daños que este piloto podría causar, la Corporación Afrowilches representada por la Corporación Podion, el Colectivo José Alvear Restrepo y la Alianza Colombia Libre de Fracking interpusieron una tutela el pasado 31 de marzo.
Por decisión de la jueza Blanca Judith Martínez la licencia ambiental será suspendida temporalmente, pues por término legal antes de aprobar proyectos de este tipo se debe desarrollar una Consulta Previa con los habitantes del territorio.
«Durante años hemos venido resistiendo al desarrollo de una técnica que se ha comprobado científicamente que contamina el agua y el ambiente, y demuestra una vez más que la implementación de estos proyectos se han realizado vulnerando derechos fundamentales a la consulta previa y la participación ambiental”, manifiesta la Alianza Colombia Libre de Fracking.
Por: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.
