El 25 de mayo del 2021 se desarrolló el evento virtual “Resultados Año 2020 del Observatorio de Inversión Privada en PDET”, organizado por el Centro Internacional para la Empresa Privada – CIPE (por sus siglas en inglés) en alianza con Jaime Arteaga & Asociados – JA&A; dos entidades que trabajan por impulsar la inversión en proyectos de los territorios más afectados por la violencia y la pobreza en Colombia.
Este espacio tuvo como objetivo dar a conocer el panorama del sector privado en las zonas del país que hacen parte de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial – PDET. Para su exposición contó con el apoyo de Simón Mejía, moderador y subdirector de JA&A.
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La presentación del balance del sector privado en los territorios PDET, estuvo a cargo de Paula Lozano, gerente de Inversión Privada de JA&A, quien reveló que en términos generales el 2020 fue un periodo complicado para los empresarios de estas zonas del país.
De acuerdo con la explicación de Lozano, estas regiones no sólo se vieron afectadas por las consecuencias de salud pública a raíz del COVID – 19, sino que el tejido empresarial se deterioró. Ya que “se pasó a crear 18.556 empresas en 2019 a 11.018 en 2020 y en materia de supervivencia de los negocios, sólo el 40% de las empresas, en promedio, siguen operando tras el impacto que la pandemia”, afirmó la gerente.
Así mismo, mencionó que existe un desequilibrio entre las posibilidades que tienen las personas para acceder a fuentes de financiamiento. Pues de cada 10.000 adultos que habitan en la urbanidad se le otorgan 3.480 créditos de consumo, mientras que en la ruralidad se otorgan sólo 99 créditos por cada 10.000 adultos.
Cabe destacar que, Lozano se refirió a un panorama positivo en el mecanismo de obras por impuestos, debido a que durante el 2020 se aprobaron alrededor 60 proyectos en 15 municipios PDET por un monto de 502’ 2.000 millones de pesos siendo los sectores de transporte y educación los que concentran el 77% de toda la inversión.
“Estos resultados dejan ver que los municipios más afectados por la violencia y la pobreza también lo fueron por la pandemia. Sin embargo, también son municipios de oportunidad y los resultados anteriores a 2020 muestran que hay dinámicas que afectan positivamente el tejido empresarial y que los actores con posibilidades para acelerar el cambio de los PDET están prestos para seguir impulsando”, concluyó Lozano.
Posteriormente, Emily Wann representante de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional – USAID realizó una reflexión sobre la importancia del sector privado para impulsar los territorios y las comunidades. En este sentido, lo reconoció como “un aliado estratégico para el desarrollo, un motor de crecimiento que ayuda a crear empleos, dinamizar mercados y reactivar la economía ahora en tiempo de pandemia”.
Finalmente, se destacó la capacidad de resiliencia de los empresarios de estos territorios que a pesar de las dificultades siguen apostándole a sus proyectos y la estabilidad de sus territorios. También, las entidades coincidieron en que hay que seguir fortaleciendo las alianzas entre entidades públicas y privadas que impulsen el desarrollo de los PDET.
“Ha sido un tiempo difícil, los empresarios tienen la posibilidad de seguir generando riqueza en los contextos donde trabajan y ese sueño en el que los municipios más afectados de la violencia se incorporen de manera integral al desarrollo del país está en manos de los empresarios”, agregó a manera de cierre Jaime Arteaga, director del Observatorio de Inversión Privada.
Por: Ivania Alejandra Aroca Gaona. Periodista.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.
