El Ministerio de Educación Nacional define la deserción escolar como: el abandono del sistema escolar por parte de los estudiantes, provocado por la combinación de factores que se generan tanto al interior del sistema como en contextos de tipo social, familiar, individual y del entorno.
Teniendo en cuenta el significado de la deserción escolar, se podrán identificar una serie de causas que se vienen presentando hoy día en nuestro país y que dan paso a que esta problemática tome cada día más fuerza.
Según el estudio realizado por la fundación United Way Colombia la cual es el resultado de la unión de la Fundación Génesis y la Fundación Dividendo por Colombia, organización que lleva más de 20 años dedicando su esfuerzo a mejorar la calidad educativa de nuestro país y luchando por disminuir los índices de deserción, se encuentra que las causas principales son:
1. La calidad educativa, aunque se evidencian algunas mejoras, es importante realizar cambios en la oferta educativa donde la educación sea pertinente para la zona rural y presente diferencias con la educación urbana.
2. Se deben combatir dificultades sociales como el matoneo, el embarazo a temprana edad, el trabajo infantil y el desplazamiento; factores que tienen mayor incidencia en las zonas rurales y en la estratos bajos del país.
Con el fin de ayudar a dar solución a las dificultades sociales que aquejan la zona rural colombiana, el Proyecto Pescado para el Desarrollo financiado por la Fundación Caritas Noruega, que se ejecuta en el departamento del Caquetá, brinda a los jóvenes de grados 9°, 10° y 11° de ocho Instituciones Educativas, la posibilidad de plantear un proyecto de vida basado en la piscicultura, el cual tiene como fin mejorar la economía del núcleo familiar del alumno y así mismo de la región.
Al mismo tiempo se ejecuta un proceso de capacitación donde los estudiantes adquieren conocimientos teórico- prácticos en el manejo de la piscicultura, lo que fortalece sus habilidades para sacar adelante sus emprendimientos. ACPO – Acción Cultural Popular, a lo largo del proyecto desarrolla 8 cursos con el fin de fortalecer el liderazgo en la comunidad rural, apoyando a los jóvenes a que cambien su mentalidad y se den cuenta que su vida en el campo es valiosa y que así como los jóvenes de la ciudad ellos también tienen muchas oportunidad de crecimiento personal y laboral.
De tal forma proyectos como Pescado para el Desarrollo dan una visión diferente a nuestros jóvenes campesinos, buscando que estos se sientan motivados a continuar con su formación secundaria y profesional. Así lograr un cambio en las cifras actuales ya que según reportes del Ministerio de Educación Nacional de 100 niños que ingresan al colegio solo 44 se gradúan.
Iniciativas como esta dan esperanza a la población más vulnerable de nuestro país, enfocando los esfuerzos para que las soluciones que se establezcan sean acorde a las necesidades de estos y vayan encaminadas a fortalecer las oportunidades de los niños, jóvenes y adolescentes de nuestro país.
Por: Sandra Liliana Riaño. Facilitadora del Proyecto Pescado para el Desarrollo.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.