Las banderas de Colombia no se izaron ayer en el departamento del Chocó, los quibdoseños salieron a las calles para protestar por el abandono al que han sido sometidos desde el mismo día de la independencia.
Por: ElCampesino.co
El departamento del Chocó es impresionante, la gente que habita esta región se caracteriza por su dulzura, amabilidad y solidaridad entre vecinos, amigos y parientes. Cuando se habla del Chocó se suele hacer referencia a la riqueza natural y minera, el oro y el platino son deseados por los colonos y los extranjeros que, gracias al abandono institucional hacen de las suyas en los ríos y las selvas.
Pero hay una paradoja, esta inmensa región esta apartada del resto del país, al departamento se llega por día vías nacionales, una por el departamento de Risaralda y otra por el departamento de Antioquia. Las dos vías son dos trochas, desde Medellín el viaje puede durar más de 20 horas y cerca de 15 por Pereira en un trayecto que en buenas condiciones no tomaría más de 5 horas y 8 horas.
En algunos barrios de la capital el agua llega por dos horas al día y en otros no hay agua, el sistema de alcantarillado es obsoleto, el hospital departamental a duras penas si funciona, no hay una conexión terrestre con el mar, la plaza de mercado es un desastre, la tasa de desempleo para 2015 fue del 15.6 por ciento mientras que la media nacional está entre el 9 y el 10 por ciento.
La conexión con las subregiones del departamento es precaria, el río Atrato o el río Quito son unas de las arterias fluviales por las que los chocoanos se movilizan, pero las pangas no son las suficientes y tampoco las más seguras.
Al Chocó lo aquejan decenas de problemas, por eso la manifestación de este 20 de Julio, los ciudadanos reclaman que mientras en otras regiones del país se construyen modernas carreteras, la conectividad de las comunicaciones es casi perfecta, al departamento se le deja de ultimo. La corrupción, es el listón del problema, uno de los últimos gobernadores ha sido investigado por el mal uso y desvió de recursos públicos.