Por: David Ruiz Guzmán – Facilitador Escuelas Digitales Campesinas Cundinamarca
En los últimos días se ha venido especulando sobre algunos asuntos que perjudicarían a la Universidad de Cundinamarca, especialmente en dos temas delicados: su privatización y el recorte de presupuesto para la Universidad en el año 2017. ¿Qué es verdad? Y ¿Qué es mentira?
La Universidad de Cundinamarca, -UdeC- es una universidad pública creada mediante Ordenanza 045 de diciembre 19 de 1969 cuya sede principal queda en el municipio de Fusagasugá. Es una de las principales instituciones educativas de educación superior en el departamento cundinamarqués con sedes distribuidas en ocho municipios: Fusagasugá, Girardot, Ubaté, Chía, Chocontá, Facatativá, Soacha y Zipaquirá.
Para su funcionamiento, la UdeC recibe recursos de la nación y el departamento que son invertidos en cerca de 12.700 estudiantes que adelantan sus estudios en 16 programas de pregrado, 3 tecnologías, 6 especializaciones y 2 maestrías.
Con relación a los recursos que la Universidad recibe del departamento de Cundinamarca, la Asamblea Departamental le aprobó al Gobernador Jorge Emilio Rey recursos para el 2017 por valor de 32.842 millones de pesos, un monto inferior a los recibidos en el año 2016 que fueron de 36.706 millones de pesos.
Ese recorte de presupuesto no sólo ha generado polémica en el departamento y en los miles de estudiantes que se benefician de la UdeC, sino que también ha suscitado comentarios que versan sobre la privatización de la Universidad.
Con estos dos panoramas, el de la privatización y la disminución de recursos, el gobernador de Cundinamarca Jorge Emilio Rey, ha tenido que salir a aclarar la situación real de la Universidad en varios medios de comunicación.
También, el 13 de febrero se realizó una sesión extraordinaria del Consejo Superior de la Universidad de Cundinamarca citada por el mismo gobernador quien es a su vez el Presidente de este consejo para informar a la opinión pública sobre la realidad del tema de inyección de recursos departamentales a la universidad. En el comunicado de prensa se destacan dos puntos que desmienten los rumores de privatización y de recorte presupuestal. El documento lo puede consultar aquí.
Sobre la primera mentira, es decir la privatización, el gobernador de Cundinamarca Jorge Emilio Rey manifestó su compromiso de “seguir impulsando la mejora de los procesos, programas y gestión de la universidad, que garantizan hoy la educación superior de la población más vulnerable del Departamento siempre desde el ámbito de lo público condición que nunca ha sido controvertida o propuesto figura diferente”.
En tanto a la segunda mentira, el recorte de presupuesto, el mandatario de los cundinamarqueses aclaró que la diferencia está en que cinco años atrás, en el año 2011, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca dispuso el pago indemnizatorio de 174.000 millones de pesos a la Universidad en un plazo de cinco (5) años, deuda que terminó de pagarse en su totalidad en el año 2016. De tal manera que el presupuesto aprobado para el año 2017 no incluye el pago de deuda, y esa es la diferencia con años anteriores en el cual al presupuesto se le adicionaba el valor del pago de la obligación.
El pago de la deuda se hizo a través de la entrega de predios en el departamento y del desembolso de $ 16.700 millones en efectivo durante cinco años hasta el 2016. Aclarados estos puntos sólo resta esperar ese nuevo ramillete de profesionales en el 2017 que le aportarán sus conocimientos a Cundinamarca. A estudiar se dijo.