Según la BBC el plástico en todas su formas existe hace aproximadamente 70 años teniendo el cuenta el uso masivo de toda actividad de compra y venta; estas décadas han sido suficientes para que el planeta se encuentre en estado de alerta; ya que los derivados del plásticos están acabando con especies marinas, e inclusive en las fuentes de agua potable ya se encuentran este tipo de deshechos.
El uso de bolsas plásticas se ha salido de control, ya que son muchos los productos que usan un empaque plástico general y uno por cada elemento que esté dentro; plásticos que en menos de una hora están aumentando el cúmulo de bolsas inservibles y que irán a parar en cualquier espacio menos en el correspondiente. Por esto, cualquier medida que evite el uso de este material estará apuntando a la conservación del planeta.
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El supermercado Rimping en Chiangmai, Tailandia ante el uso exuberante de plástico ha decidido que en la compra de verduras, frutas y algunos productos a base de harinas como tortillas sean traídos en hojas de plátano y contribuir a disminuir su huella de carbono; pues como lo explica la gerencia, las bolsas plásticas son un problema para su país y quieren contribuir al medio ambiente.
Con tan solo una hoja de plátano se pueden envolver 12 unidades de lechuga, es decir, que se está evitando el uso de una docena de material plástico, que una vez llegado a los hogares se desecha. Gran parte de los consumidores mencionan que es una gran estrategia, ya que las bolsas de las verduras no funcionan para ser reutilizadas.
Sin embargo, también cabe aclarar que para muchos consumidores esta estrategia resulta poco higiénica y no ayuda a preservar los alimentos, por lo tanto, no les resulta rentable. Los productos vendidos en hoja de plátano hasta el momento no han tenido inconveniente con la preservación al estar refrigerados; haciendo evidente que el problema radica en el hábito natural de los consumidores, es decir, que aún falta educación ambiental.
En el caso de Colombia, con el impuesto a la compra de la bolsa plástica el 71% de los hogares colombianos redujo un 30% el uso de este material. Sin embargo, la cantidad sigue siendo enorme al contar los productos que usan más de una bolsa que en su mayoría es dulcería y no en menor cantidad, frutas y verduras.
Países como Nueva Zelanda han creado campañas como «Alimentos Desnudos» para reducir el uso del plástico y en el caso de Colombia municipios como Iza y Nobsa le han dicho no al icopor, el cual es otro elemento de excesivo consumo en el país y de gran daño ambiental. El planeta necesita que estrategias como estas se sigan extendiendo, y así, eliminar el efecto de la contaminación humana a ecosistemas que son esenciales para la vida misma.
Por: Daimer Fernando Losada Bermeo. Periodista.
Editor: Lina María Serna. Periodista – Editora