Si bien el país pasa por una época de sequía los ríos y quebradas abundan en las regiones. Ciudades capitales no cuentan con el servicio se agua potable
Por: Andrés A. Gómez Martín.
De los ríos y las quebradas unos pueden tomar el agua para vivir, otros tantos deben llevar el líquido a lomo de burro o de caballo. El 28 % de la población rural en Colombia no cuenta con acueducto, lo que los obliga a buscar el agua en pozos profundos, riachuelos y ríos, corriendo peligro de contraer enfermedades bacterianas a causa, en muchos casos, del mal estado del agua.
Sin embargo en Colombia, una potencia hídrica por excelencia, hay municipios que son capitales de departamento que no tienen agua potable, ni siquiera agua las 24 horas del día. Uno de los ejemplos es Yopal, capital del Casanare. 180 mil habitantes de este municipio completan ya 4 años sin agua. En el año 2011 un derrumbe destruyó la boca toma del acueducto municipal. Los gobiernos regionales, locales y nacionales han invertido en su recuperación una cifra astronómica, 100 mil millones de pesos, pero aún hoy el agua sigue llegando en carro tanques y los habitantes deben desplazarse a puntos específicos en donde se habilitaron llaves para dar agua. En Yopal lo han intentado todo, pozos profundos y unos tanques modulares para guardar allí el agua, pero que se derrumbaron unas horas antes de su entrega oficial.
Otro municipio que tampoco tiene agua es Quibdó en el departamento del Chocó. Según cifras del DANE, mientras que en el país un 37 % de los habitantes no tienen satisfechas las necesidades básicas, en el Chocó esta cifra llega al 81 %. Quibdó está ubicado al lado del río Atrato, aun así algunas zonas el municipio no cuenta con agua potable, dependen del agua lluvia que logran recoger en tanques y en ollas. La empresa de servicio públicos ha sido intervenida por el el gobierno debido a los malos manejos administrativos.