Esta es la oración que dedica el Papa Francisco a los jóvenes.
Señor Jesús,
tu Iglesia en el camino al Sínodo
dirige su mirada a todos los jóvenes del mundo.
Te rezamos porque con coraje
tomen sus vidas en sus manos,
apunten a las cosas más bellas y más profundas
y siempre mantengan un corazón libre.
Acompañados por guías sabios y generosos,
sean ayudados a responder a la llamada
que diriges a cada uno de ellos,
para realizar su propio proyecto de vida
y alcanzar la felicidad.
Mantén sus corazones abiertos a grandes sueños
y hazlos atentos al bien de los hermanos.
Como el Discípulo amado,
ellos también estén bajo la Cruz
para dar la bienvenida a tu Madre, recibiéndola como un regalo tuyo.
Sean testigos de tu Resurrección
y sepan reconocerte vivo junto a ellos
anunciando con alegría que Tú eres el Señor.
Amén.
Tomado de: es.aleteia.org