Desde el mes de diciembre del año pasado se venía hablando en las regiones sobre un nuevo paro agrario. Los dirigentes rurales han asistido a las mesas de concertación que se instalaron luego del último gran paro campesino del 2013. La Cumbre Agraria manifestó que no se han materializado las soluciones ni los acuerdos.
Por: Andrés. A. Gómez Martín.
En el año 2013 el país vio como los campesinos se manifestaron en las carreteras del país, mientras los medios de comunicación reportaban bloqueos y enfrentamientos entre los manifestantes y la fuerza pública, los motivos del paro quedaron en un segundo plano.
Por aquel entonces nacieron las Dignidades Campesinas que representaban a los diferentes sectores de la industria rural colombiana, entre las peticiones de los campesinos se destacaban las siguientes:
Las negociaciones de los tratados de libre comercio generaron malestar en el sector rural, según los campesinos no existían las condiciones para que ellos hicieran parte del negocio. El argumento base indicaba que la producción nacional se diezmaría por la llegada de productos extranjeros como la papa, la cebolla y la leche.
Según datos de la Sociedad Colombiana de Agricultores, Colombia importa el 25 por ciento de los alimentos que consume. Rafael Mejía, director de la SAC, destacó en diciembre del año pasado, que las compras de alimentos de Colombia a los Estados Unidos, pasaron de un 24 a un 58 por ciento.
Por otro lado, los campesinos destacaron que las políticas minero energéticas, estaban afectando a sus comunidades y a sus territorios, la expansión de la minería ilegal y también de la minería formal, empezaba a copar territorios que antes estaban destinados a los cultivos transitorios como el arroz o el plátano, además de afectar grandes reservas naturales de importancia estratégica para la nación.
Los campesinos del Catatumbo han sido enfáticos en sus reclamos, para la Asociación Campesina del Simitarra, el abandono del estado ha sido el principal problema, los cultivos de coca que existen en esa región del país, aumentaron entre otras cosas, porque los cultivos de lícitos no dan ganancia al campesino; por eso el Catatumbo fue ocupado por todos los actores del conflicto, que en ausencia del estado, han impuesto un alter gobierno. Además destacaron que las vías de acceso al departamento y al Catatumbo, son casi impenetrables.
Los indígenas y las asociaciones afro del departamento del Cuaca, exigen participación en la mesa de diálogos de la Habana, su argumento base destaca que sus territorios han sido escenario de la guerra interna del país durante los últimos 50 años; además aseguran que la minería ilegal le ha quitado espacio para cultivar.