El acceso a crédito para las mujeres rurales ha sido históricamente un inconveniente para apoyar su desarrollo. Según datos de la Corporación Financiera Internacional al menos el 70% de las pequeñas y medianas empresas propiedad de mujeres dentro del sector formal en países en vía de desarrollo están poco o nada atendidas por las instituciones financieras, asegurando que el déficit puede rondar los 285 millones de dólares.
Además, dice el Banco Mundial de la Mujer que se debe seguir trabajando para eliminar esa brecha que existen entre hombres y mujeres para acceder a créditos puesto que “las mujeres en general tienen una cartera menor en riesgo, son clientes fieles y tienden a comprar más productos. Le puede interesar: Programa ayuda a 202 pequeños productores de leche e impulsa a las mujeres campesinas
¿Quienes son las mujeres rurales?
Para poder atender a las necesidades reales que tienen las mujeres en el campo es necesario escucharlas, construir con ellas como pares teniendo en cuenta sus preferencias y los contextos en los que se desarrollan. De tal modo, se asegura que las inversiones que se oferten y se tomen servirán para la evolución del campo con un enfoque de mujer.
Y para ello, además, dice el Banco de la Mujer es necesario comprender que existen tres tipos de mujeres identificados por ellos. Las primeras las contribuyentes que son aquellas en las que en sus hogares el hombre es quien toma decisiones y sostiene a la familia. Le puede interesar: Mujeres rurales construirán políticas públicas en Quindío
Hay otras mujeres que son las colaboradoras, que son quienes comparten las funciones y la economía con la pareja, pero son una sola economía y por último, las propietarias únicas que son aquellas que tienen voz y economía con la pareja pero tienen además negocios de forma independiente.
Soluciones prácticas para las mujeres del campo
Dice el Banco de la Mujer que dependiendo lo que oferten las entidades financieras las mujeres podrán postularse. Sin embargo, entregan 6 claves para que también las instituciones sepan que puede ser lo más adecuado para ellas.
- Ajustar las características del producto (condiciones de los préstamos, garantías, documentación) para hacer del crédito algo accesible para las mujeres y relevante para sus actividades económicas.
- Permitir varios préstamos por el hogar.
- Centrase específicamente en las mujeres – campañas de marketing en su lenguaje y en sus términos (canales de distribución).
- Modificar las metodologías de crédito existentes para que midan la totalidad de los ingresos familiares y el potencial de crecimiento de todos los negocios que estén generando ingresos.
- Capacitar al personal para ver a las mujeres como clientes viables y valiosos.
- Mesurar la buena atención a las mujeres y conectarlo con sus indicadores clave de rendimiento.
Con información de FAO y Banco de la Mujer