El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Luis Gilberto Murillo, le envió una carta al fiscal general Néstor Humberto Martínez, en donde le explica las razones por las cuales ese ministerio rechaza la propuesta de volver a la fumigación con glifosato para combatir los cultivos ilícitos.
En la comunicación el ministro Murillo, le manifestó al Fiscal General que comparte la preocupación que tiene acerca del aumento de cultivos ilícitos en el país pero que no debe combatirse con aspersión de glifosato. Para el jefe de la cartera ambiental los cultivos ilícitos no solo son la fuente de financiación de los narcotraficantes, también son uno de los principales factores de deforestación en Colombia, un país que tiene actualmente 124.035 hectáreas deforestadas.
Pero pese a compartir esta preocupación, el ministro de Ambiente dejó claro que se deben buscar alternativas diferentes a la aspersión aérea de herbicidas para la erradicación de cultivos de coca. Estas nuevas alternativas deben estar enfocadas en dos aspectos: la erradicación de los cultivos de coca y la conservación del medio ambiente. En el comunicado el ministro Murillo expresa que las aspersiones aéreas con químicos como el glifosato pueden causar impactos negativos a la biodiversidad de las eco-regiones como la Amazonía, la Orinoquía y el Chocó.
Para el ministro de Ambiente la mejor alternativa en la actualidad sigue siendo la erradicación manual y la sustitución de cultivos. En el mensaje enviado al fiscal Martínez, le indica que este método entro el 2005 y 2008 logró erradicar 96 mil hectáreas, una cifra récord teniendo en cuenta las condiciones adversas del conflicto armado.
De esta forma MinAmbiente deja clara su posición y responde a la comunicación que en semanas pasadas el fiscal Martínez envió al Ministro de Justicia donde le solicitaba una reunión para discutir la posible vuelta de la fumigación con glifosato.
