En una entrevista para el Campesino doña Mery, nos cuenta que vive en el municipio de Une, Cundinamarca, trabaja como secretaria desde hace un largo tiempo y está casada con un agricultor.
En su tiempo libre se dedica a acompañar a su esposo, ayudarle en la labranza, deshierbar matas y a llevarle su comida.
(…) “No sé mucho del campo, de las labores que hacen los campesinos, pero me gusta, me la paso bien, me siento tranquila” según doña Mery.
¿Hace cuánto conoce ACPO, señora Mery?
La primera historia que recuerdo es de Radio Sutatenza, de ahí conozco ACPO porque lo escuchaba nombrar por mis papás y por las personas del municipio, recuerdo que acá, traían la edición del Periódico el Campesino y la podías encontrar en el atrio de la iglesia.
A mí me gustaba mucho el periódico, se podían leer coplas, miraba consejos que daban sobre cómo cultivar y contaban historias, dijo Mery al referirse a la publicación de El Campesino impreso.
¿Por qué ingresó a Escuelas Digitales Campesinas? ¿Cuál era el interés?
Primero vino la facilitadora Elita Flores promocionando el curso de Comunicación y Periodismo Rural, además, por medio de la parroquia el padre convocó a las personas del sector (…)
Dentro de la entrevista Mery nos cuenta que: “La facilitadora me invito a participar, pero yo no tenía mucha ilusión pues mi trabajo me ocupa mucho tiempo y tenía en mi imaginario que un periodista debía estar para todo el tiempo, no solo a raticos”.
Mery recuerda que era la mayor del grupo con 48 años, aun así, dice que: “Elita fue una motivación para continuar, le fui cogiendo cariño, me fue gustando más el arte de escribir y contar historias”.
¿Por qué le gusta hacer periodismo? ¿Por qué contar historias del campo?
Doña Mery Adelaida, relata que proviene de una familia de campesinos, pero que ella no fue criada en el campo, pero si en el pueblo, aun así dice “el no haber vivido en el campo no me aleja de el”.
Además, nos cuenta que también le gusta ser periodista: “porqué en las veredas hay muchas personas con gran sabiduría que han aprendido de sus antepasados, y las personas ya no le colocan atención por el corre corre del día a día”.
Miles de sentimientos en cada historia
Mery nos dice que cada vez que realiza una entrevista a algún habitante rural son miles de sentimientos los que surgen de ella, pero, sobre todo felicidad por poder plasmar cada una de las historias.
Alegría, es el sentimiento que la mueve por transmitir las historias… “esto llega a muchas otras personas, las cuales lo leen y de pronto recuerdan de las tradiciones de sus familias y no se olvidan de lo bonito que es el campo”, nos cuenta doña Mery Ardila.
Anécdotas dentro de cada historia
Mery, esta destacada reportera rural habla de las diferentes anécdotas que ha pasado en cada una de sus entrevistas.
Una de sus anécdotas que no fue “tan buena” según ella, fue el hecho de ir a entrevistar a un señor que cultiva maíz y a preguntarle sobre su sabiduría.
(…) “entonces él me dijo que él no estaba para entrevistas, porque alguna vez alguien llegó y le preguntó cosas y luego las publicó sin permiso de él, y resulto diciendo cosas que no eran”.
Y una de las anécdotas más bonitas que recuerda, fue cuando hizo la entrevista sobre la romana, en la cual el señor le dijo que “le llevara la hojita donde salía para tenerla de recuerdo”. Le puede interesar Don José Guativa: un hombre de tradición agrícola que aún trabaja con la Romana
Ella, nos cuenta que le surgió la idea de imprimirla y llevársela a la vereda donde vive, y el señor se puso muy feliz y le dio muchos agradecimientos.
Un mensaje para motivar a la Red de Reporteros Rurales
Mery Ardila envía el siguiente mensaje: “invito a mis compañeros, para que ellos exploten esos talentos tan bonitos que tienen, ya que debido a su juventud tienen muchas ideas, que sigan adelante, que sigamos trabajando todos y sigamos resaltando las historias de nuestras comunidades”.
Por: Genny Mantilla. Estudiante de Comunicación Social – Periodismo
Editor: Ana María Rizo Díaz. Periodista – Editora.