La voz de una persona mayor.
Por: Luis Alejandro Salas Lezaca
Hace unos años se decía en forma despectiva que los campesinos eran unos indios ignorantes, unos maleducados, una gente inculta. Esta es una verdad a medias. Podríamos decir que hoy también hay personas con estas condiciones. Y podemos afirmar que muchas cosas han sufrido grandes modificaciones.
Cuando hablamos de indios nos referimos más a los naturales del país asiático denominado la India y no tanto a los indígenas de América. Y los ignorantes no son totales o generales, ya que todos sabemos algo aunque también ignoremos mucho. Los maleducados no son simplemente los malcriados, los que no recibieron en su infancia una información inadecuada para la época o para la vida civil. Y los incultos son los de corta instrucción o de modales bruscos y groseros. Es decir que todos somos incultos pero todos tenemos una cultura
Hay quienes entienden por cultura las buenas maneras, el trato delicado, la correcta urbanidad y en esto observamos que también en la sociedad actual existen fallas garrafales. Estemos atentos al modo como se hablan y se tratan los jóvenes entre sí y cómo se comportan en general con las personas mayores.
Y si nos referimos a la cultura como al cultivo, al cuidado que se da a la formación individual y grupal, notamos también bastante descuido.
Todos los pueblos tienen su cultura y sus culturas, es decir el modo como se vive, la forma de ver la existencia, el conjunto de conocimientos, de comportamientos, de usos y hábitos, de costumbres de los grupos o conjuntos o comunidades, el modo de ser con respecto al trato comercial, a la participación política, a la visión económica, a la instrucción, a la capacitación profesional. Las ceremonias y cultos religiosos, la fe y las oraciones, la vida familiar con todo lo que esto encierra, la visión de la tierra y el mundo hacen parte de la cultura. Así como las aspiraciones y las esperanzas, los sueños y los propósitos, los proyectos, la paz y la violencia, las alegrías y las tristezas, la convivencia y las expresiones del amor.
El mundo rural ha tenido una cultura muy rica y algunos organismos han intervenido fuertemente para modificarlo como los medios de comunicación, los planteles educativos, los movimientos religiosos, las organizaciones políticas, las estructuras económicas.
Debemos procurar que toda esta verdadera “acción cultural popular” contribuya efectivamente para un mejor vivir, convivir y dejar vivir