El ensilaje es una técnica de preservación de forrajes verdes que permite conservar casi intacto el valor nutritivo del alimento. En Colombia esta técnica es utilizada en el sector ganadero para hacer frente a épocas en las que las condiciones climáticas son poco favorables para el ganado. Pues no solo posibilita reservas de alimento sino que es una alternativa para disminuir los costos de suplementación.
Dicha técnica se logra mediante la fermentación láctica en condiciones anaerobias, es decir sin oxígeno, cuando las bacterias epifíticas de ácido láctico fermentan los carbohidratos hidrosolubles del forraje. Al generarse ácido láctico el pH del alimento ensilado baja a un nivel que no es afectado por microorganismos que puedan inducir a la putrefacción del silo.
Teniendo en cuenta las afectaciones causadas por la fuerte sequía fruto del fenómeno de El Niño y ahora con la intensidad de las lluvias del fenómeno de La Niña, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural inició la entrega de 9.000 toneladas de silo que serán repartidas en 84 municipios del territorio colombiano.
Respecto a los beneficiarios del programa, son ganaderos que tienen menos de 50 cabezas de ganado y que hacen parte de los 84 municipios declarados en calamidad pública de la Costa Atlántica y Arauca. Además, cabe mencionar que las otras entregas se están realizando desde el 4 y hasta el 9 de junio en Arroyohondo, Bolívar; Maicao, La Guajira; Montería, Córdoba; Bosconia, Cesar; Fundación y Salamina, Magdalena; Baranoa, Campo de la Cruz y Juan de Acosta, Atlántico.
Así mismo, estos recursos se complementan con la ayuda entregada en el primer trimestre del 2019 con 16.000 toneladas de ensilaje y concentrado, beneficiando a más de 10.000 pequeños ganaderos en 18 departamentos y cerca de 300 municipios. Lo que indica un avance en la atención de la cadena productiva, pero además es una situación que invita al fortalecimiento de programas pertinentes para que este sector sea competitivo y así aportar a la disminución de importaciones de productos cárnicos y lácteos.
El mango es una de las frutas con mayor demanda en el país, pues su sabor y su textura lo hacen un gran aliado para la preparación de distintos platos o simplemente para el consumo como fruta fresca. No obstante, todos sus beneficios no son aprovechados al 100% ya que generalmente la cáscara y la semilla son tiradas a la basura.
Por esta razón Luis Miguel Buelvas, magíster en Ingeniería Química de la Universidad Nacional realizó una investigación para encontrar una alternativa de aprovechamiento del cultivo de mango que pueda ser utilizada en la cadena productiva del país. Se trata de un estudio que evaluó el potencial industrial de la semilla de esta fruta teniendo en cuenta que esta contiene compuestos como ácidos gálico y elágico, además de mangiferina.
Para la investigación se implementaron métodos poco convencionales como las técnicas de extracción con fluidos presurizados con dióxido de carbono supercrítico y etanol como cosolvente, esto como una alternativa a los procesos que requieren grandes cantidades de solventes que llegan a ser contaminantes.
Los extractos obtenidos fueron agregados a aceite de girasol para someterlo a un proceso de oxidación, esto con el propósito de ver que tanto se podía dañar o proteger el producto con ayuda de los extractos de la semilla de mango, lo que se comparó con el uso de antioxidantes sintéticos como control. A partir de este procedimiento el cual arrojó buenos resultados de protección, se determinaron condiciones para mejorar el proceso de extracción.
Del mismo modo, se hace un llamado a reemplazar parcialmente el antioxidante sintético generalmente utilizado en las grandes cadenas productivas por extractos naturales como el de la semilla de mango, que no solo le apuesta a la producción sostenible sino a la reactivación económica de zonas productoras de mango.
En el marco de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de campesinos y otras personas que trabajan en zonas rurales se configuró la segunda versión del concurso de fotografía “El Campo Cuenta”, el cual tuvo como resultado la participación de 240 personas a nivel nacional y más de 400 fotografías que reflejan distintos contextos del campesinado colombiano.
Este año Acción Cultural Popular – ACPO y su periódico elcampesino.co, de la mano de la Embajada de Bélgica y la Registraduría Nacional del Estado Civil y el Centro de Estudios en Democracia y Asuntos Electorales – CEDAE, llevaron a cabo la segunda versión del concurso; en el que se seleccionó las diez mejores fotos, las cuales fueron expuestas y apreciadas por el público invitado.
En la noche, Mariana Córdoba, Directora general de ACPO, hizo un recorrido en el pasado de su vida para hablar sobre dos paradigmas que ha tenido presente de la fotografía. Primero, la fotografía como espejo donde es importante la realidad que se encuentra delante de la cámara; y el segundo, la fotografía como un lápiz, es decir, que las personas que están detrás de la cámara con su lente pueden cambiar esa realidad.
“Con ACPO y nuestros aliados organizamos este concurso un poco bajo estos dos premisas. Queremos visibilizar la realidad del campo colombiano, una realidad que es muy bella, muy digna, pero a su vez está plagada de injusticias. Este año nuestro concurso de fotografía tiene un tema especial que son los Derechos Humanos del Campesino, un camino de 17 años que se recorrió para construir esta declaración; y con tristeza vimos que Colombia fue uno de los países que se abstuvo de votar”, comentó la directora.
Cundinamarca, Tolima y Nariño, protagonistas durante la premiación
Foto: Claudia Ruiz
Así fue como Claudia Yaneth Ruiz, artista plástica, amiga del campo hace algunos años y ganadora oficial del concurso este año, logró esta fotografía en la represa del Guavio ubicada en Gachalá, Cundinamarca; allí, los ganaderos hacen largas travesías, cruzando montes, valles y represas, para llegar hasta el mercado a vender sus productos. “Yo me enteré que los domingos los campesinos venían al mercado en lanchas y planchones atravesando la represa de Guavio en Gachalá, para vender ganado y productos del campo. Yo dije eso no me lo pierdo, fue algo bello, pero bastante difícil, porque es dolorosa la realidad del campesino; la vida del campo es dura”, expresa Claudia explicando lo que quiso representar a través de su fotografía.
Foto: Juan Carlos Escobar
El segundo lugar se lo llevó Juan Carlos Escobar, oriundo de Ibagué, con una fotografía que refleja un gran proyecto que inició Consuelo Cendales, líder comunal en la vereda El Gallo ubicada entre las montañas en el Cañón de Combeima en Tolima. Ella creó un espacio en el que se comparte la literatura con toda la población; con esta fotografía se da lugar al artículo 25 de la Declaración, en el que se resalta el derecho a la educación y formación para campesinos y otras personas que trabajan en zonas rurales.
Foto: Roberth Santacruz
El tercer lugar se lo llevó el joven nariñense Roberth Santacruz, con su fotografía Vasija de barro. «Es una foto tomada en Catambuco, Nariño, y cuenta mucho lo que es la tradición y las raíces puras de donde provenimos», cuenta Santacruz resaltando la labor del campesino como guardián de semillas, en especial del maíz, que puede apreciarse en su fotografía.
Por otro lado, el doctor Orlando Beltrán, Secretario General de la Registraduría Nacional del Estado Civil quien estuvo presente en el evento de premiación, rescató la importancia del concurso de fotografía «El Campo Cuenta»:
«Este concurso es muy importante porque nos pone a todos frente a la realidad del campo, frente a esa otra parte de Colombia tan hermosa que muchas veces olvidamos, esperemos que estos concursos se sigan haciendo, sigamos fortaleciendo el vínculo entre entidades y podamos desde la Registraduría Civil seguir apoyando estas iniciativas», dice el Secretario General.
Exposición fotográfica itinerante en Bogotá: El campo en la ciudad
Las 10 fotografías elegidas para conformar la exposición fotográfica itinerante ya están en las calles de Bogotá. Quien desee visitar la exposición, podrá acercarse al Túnel Peatonal y Galería Cultural San Diego Tequendama, ubicado en la Carrera 10 con Calle 26, donde estarán las 10 fotografías expuestas hasta el próximo 15 de julio.
De allí se trasladará la exposición hacia el Parque Bicentenario, en la Calle 26 con Carrera 6ª, y estará habilitada del 15 de julio al 30 de agosto. La exposición finaliza en la Escalinata La Merced, ubicada en la Calle 35 entre Carreras 5ta y 7ma, donde estará vigente del 30 de agosto al 15 de octubre.
Esta exposición es la oportunidad de acercar el campo a la ciudad, pero, sobre todo, de motivar la reflexión sobre la importancia de las y los campesinos en Colombia y el mundo.
Acción Cultural Popular – ACPO, invita a todos los fotógrafos profesionales y amateurs a que se unan el próximo año y que desde su labor contribuyan a la visibilización y la transformación de la realidad de nuestros campesinos que son eje fundamental de Colombia.
Este concurso, su 2da. edición, contó con el apoyo de: Embajada de Bélgica, Registraduría Nacional del Estado Civil, Centro de Estudios en Democracia y Asuntos Electorales – CEDAE, RCN Radio, Aura Creative, Zona Cinco – Escuela de Cine y Fotografía, Agrocampo, Centro Internacional AsoSandiego, Kompass y Ojo Rojo Fábrica Visual.
Por: Daimer Fernando Losada Bermeo. Periodista. Editor: Lina María Serna. Periodista – Editora.
El lunes 10 de junio se llevará a cabo una importante celebración que conmemora la creatividad de los profesores en el país; los Premios Compartir 2019; una labor que potencia y celebra la Fundación Compartir por el compromiso social y ambiental con sus territorios. Son educadores que se han dedicado por completo al bienestar de niños, niñas, jóvenes y adultos, puesto que su función como ellos mismos lo mencionan, es el apoyo a todo el núcleo familiar de los estudiantes.
Cada uno de los maestros lleva un largo recorrido en el servicio de la educación, pero más allá, se han enamorado de un eje primordial para el país, el campo colombiano. En algunos casos, estos candidatos llevan décadas ejerciendo su labor y cambiando sus vidas por completo por la tranquilidad y bienestar que le ofrece la ruralidad del país.
Para participar en los premios de la Fundación Compartir que destaca a los mejores maestros y rectores de Colombia se realiza cada año un proceso de participación abierta a los docentes para presentar sus mejores propuestas basadas en una pedagogía innovadora que aporta vitalmente a las comunidades y al medioambiente. Este año se postularon profesores de Nariño, Córdoba, Boyacá, Valle del Cauca, Antioquia, Bolívar, Cundinamarca, Caldas, Huila, Caquetá y Putumayo. Si quieres conocer más a fondo las 16 propuestas da click aquí para descargarlas.
Los proyectos se destacan por combinar el bienestar familiar con el componente ambiental; en el caso del Boyacá se le enseña a niños y niñas la importancia de la tierra para el abastecimiento alimentario de los hogares colombianos, el reconocimiento de semillas nativas y las prácticas ancestrales que nos brindan los abuelitos. También, en otros departamentos se enfocan al cuidado de ecosistemas importantes como ríos, quebradas y bosques a partir de métodos sostenibles para la población que usan estrategias como el reciclaje, el facilitamiento de las labores de nuestros agricultores y una pedagogía más práctica que teórica.
Cabe resaltar que para nuevos proyectos o para profesores que llevan algún tiempo implementado alguno, pero desconocen de este importante premio, ya pueden postularse para la edición del año 2020. Para conocer más información respecto a este proceso da click aquí.
Por: Daimer Fernando Losada Bermeo. Periodista. Editor: Lina María Serna. Periodista – Editora.
Este es un cuento elaborado por un estudiante de grado noveno en el marco del proyecto Valores Cívicos y Democráticos en la Institución Educativa Técnica San Luis ubicada en Garagoa, Boyacá.
“Juan y Daniel son los mejores amigos desde la primaria, siempre hacían los trabajos juntos, comían juntos y a veces Juan dormía en la casa de Daniel o Daniel en la casa de Juan. Cada uno ya tiene 15 años y siguen siendo los mejores amigos. Un día Juan estaba en el colegio y unos niños lo invitaron a almorzar, y él aceptó pero Daniel entró al restaurante y vio que su mejor amigo estaba almorzando con otros niños y no lo había esperado.
Daniel en ese momento sintió tanta rabia, que se dirigió a la mesa he hizo un escándalo que causaría una pelea entre los dos amigos. En el colegio no se volvieron a juntar, no se hablaban ni se miraban., duraron así durante un mes y un día uno de los amigos de Juan, decidió hacer algo para volver a juntarlos.
Se comunicó primero con Daniel y le dijo que fuera a casa, para jugar Xbox. Después llamó a Juan y le dijo que fuera a la casa, para ver una película. Al día siguiente cuando ambos llegaron quedaron sin palabras, porque por dentro querían volver a ser amigos. Entonces Daniel se acercó a Juan y le pidió disculpas, lo mismo hizo Juan, hablaron de todo lo que paso y lograron reconciliarse.
Los dos quisieron hablar desde que se conocieron hasta el día en que pelearon, los dos buscaron soluciones, para no estar peleando. Llegaron a un acuerdo y seguirán como mejores amigos, pero también puede cada uno tener más amigos y compartir con otras personas”.
Por: Julián David Camacho Roa. Estudiante de Garagoa, Boyacá
En febrero y abril de 2016 se le notificó a la población de Salento, Quindío por parte de la Agencia Nacional de Minería sobre procesos y trámites para monitorear y evaluar los terrenos con el fin de extraer recursos minerales; una noticia que dejó a la población en desasosiego por tratarse de su territorio, pero sobretodo de áreas conectadas al Valle de Cocora y el Parque Nacional Natural de los Nevados; zonas que se suponían son áreas de protección.
La población y el país comenzó a usar redes sociales y a protestar en contra del posible megaproyecto, llegando a un punto de calma por no comentarse nada más grave sobre el asunto; sin embargo, el Tribunal Administrativo del Quindío ha vuelto a poner el tema en estado de alerta, puesto que el acuerdo establecido por el Concejo Municipal que determinaba la prohibición de proyectos mineros en el territorio ha sido impedido y dado de baja por el Tribunal.
Esto quiere decir que el municipio de Salento pierde jurisdicción frente a la toma de estas decisiones. Cabe resaltar que no es el único municipio que pasa por la misma situación; desde la sentencia de la Corte Constitucional frente a las consultas populares que establece que una población no puede tomar decisiones frente a los recursos naturales sin importar que se encuentren en sus territorios y sean ecosistemas importantes con especies únicas.
Al igual que Salento, el municipio de Roncesvalle, Tolima también celebraba un acuerdo realizado por la población y el concejo municipal que impedía cualquier tipo de proyecto que afectara de manera radical el pueblo; frente a esto, el alcalde afirmó que esta decisión era inconcebible puesto que el concejo no tiene poder alguno para tomar estas decisiones y de proseguir con el acuerdo sería condenar al pueblo a la demanda del Estado. Roncesvalles es un municipio que cuenta con una fuente hídrica escasa, la cual en sequía no abastece por completo a toda la población, por esto, no imaginan megaproyectos mineros en se territorio.
Regresando a Salento, la concejala del municipio, Ofa Correa, menciona lo siguiente al periódico El Tiempo: “Seguiremos luchando, nos vamos a dar a la tarea de revisar bien la sentencia y pondremos una tutela. En este caso no aplican los fallos, el Tribunal no tuvo en cuenta el último fallo del Consejo de Estado de diciembre del año pasado donde nos permiten a nosotros como concejales defender nuestro territorio”.
Ambientalistas, población rural y urbana se encuentran tomando medidas al respecto frente al fallo del tribunal Administrativo al no respaldar el bienestar del municipio, el cual comprende el respeto por la fauna y flora, los recursos naturales y el futuro del territorio. En este caso, el fallo se dictamina a partir dela Sentencia SU – 095 del 11 de octubre de 2018 de la Corte Constitucional, al declarar que “el Estado es propietario del subsuelo y sus recursos no renovables, lo que conlleva que sea privativamente este quien decida sobre la explotación de dichos recursos”.
Los municipios habían hecho uso de este mecanismo constitucional de participación donde la decisión del pueblo era primordial ante proyectos extractivistas; hoy las cosas son diferentes para los colombianos pues aunque se trata de sus territorios no pueden incidir en asuntos del Estado. Mientras tanto, los salentunos seguirán trabajando para evitar que la minería llegue al municipio.
Por: Daimer Fernando Losada Bermeo. Periodista. Editor: Lina María Serna. Periodista – Editora.
La Copa Nacional de Baloncesto es un espacio creado para que los equipos colombianos dedicados a este deporte puedan mostrar sus habilidades, proyectarse en una competencia de alto nivel y lograr a partir de ello, alianzas y contactos que les permitan fortalecer sus carreras. Para este año, el lanzamiento se realizó el pasado 04 de abril en la sede del Comité Olímpico Colombiano en Bogotá.
La temporada inició el 05 de abril en el municipio de Itsmina, Chocó y cuenta con once equipos participantes y tres confederaciones distintas que quedaron divididas según la ubicación geográfica de cada equipo. La primera fase del torneo estuvo dividida en cinco fechas en las que los equipos compitieron para llegar a la semifinal, en esta etapa los equipos fueron organizados en dos divisiones cada una conformada por cuatro equipos.
En la División Nacional se encuentran los Bay Barrack y los Hill de San Andrés; Tribu Halcones de Cúcuta y Caribbean Heat de Bucaramanga. Y en la División Colombia se encuentran los Cimarrones del Chocó; Cafeteros de Armenia; Club Deportivo Meta de Villavicencio y Guerreros de Bogotá. Estos grupos se enfrentarán en cuadrangular y los dos mejores equipos de cada división jugarán en el Final Tour.
Esta temporada tiene el objetivo de clasificar a los Juegos Olímpicos de París 2024 y a los Juegos Mundiales con sede en Indonesia, competencias que requieren del fortalecimiento que se genera en los torneos locales. Además, cabe mencionar que tanto los deportistas como los aficionados podrán observar cada uno de los partidos vía streaming por el canal oficial de YouTube de la Federación Colombiana de Baloncesto, igualmente por medio de las redes sociales se compartirán las estadísticas de cada duelo.
El cultivo de plátano en Colombia representa cerca del 50% del área sembrada en el país con cerca de 500 mil hectáreas cultivadas, y aunque es un fruto que se da en todo el territorio colombiano, su producción es principalmente para el consumo interno. Según datos del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural para 2017 el principal productor fue el departamento de Antioquia con un total de 61.000 hectáreas sembradas, seguido por Arauca, Quindío, Córdoba y Valle del Cauca.
Históricamente el plátano ha representado uno de los alimentos más importantes en la dieta de los colombianos, pues desde la época en la que habitaban únicamente los pueblos originarios este fruto era uno de los más consumidos. Actualmente, en los territorios habitados por los grupos étnicos del país se concentra en gran medida el cultivo de plátano por encima de otros alimentos, alcanzando el 40% de sus áreas sembradas.
Entre las variedades de plátano más cultivadas a nivel nacional se encuentra el Hartón, Dominico y Cachaco, siendo este último muy apetecido en el Tolima y el Huila ya que también se comercializa la hoja. En cuanto al aspecto laboral, este cultivo genera más de un millón y medio de empleos, de los cuales más de la mitad son en empleos indirectos para cultivos con producción tecnificada.
Colombia llegó a convertirse hace unos años en el segundo país importador de plátano, lo que resulta preocupante teniendo en cuenta que los suelos tropicales de las distintas regiones pueden producir lo suficiente para cubrir la demanda nacional, solo que el sector platanero se ve afectado por la falta de tecnología y programas pertinentes. No obstante, para 2017 hubo una reducción de 28% en las importaciones de plátano que principalmente viene desde Ecuador y las áreas sembradas en el país incrementaron.
Aspectos que evidencian la capacidad del país para cubrir la demanda nacional de este alimento y por las que es de gran importancia que los pequeños y medianos productores trabajen desde las buenas prácticas agrícolas, y sobretodo con los planes de Manejo Integrado de plagas y Enfermedades – MIPE que permiten la correcta prevención, monitoreo e intervención frente a los factores que afectan negativamente los cultivos.
Poco a poco se ha ido abordando en el país y en el mundo la importancia del proceso de polinización para garantizar la vida misma. Las abejas son la primera especie encargada de polinizar el 75% de los alimentos que se consumen en el planeta, esto quiere decir, que cumplen un rol objetivamente importante y es deber por parte del ser humano trabajar por su protección al igual que de otras especies que apoyan esta función.
El año pasada la población interesada por las abejas en el país celebraban el fallo expedido en Cartagena, Bolívar que se basaba en la creación de políticas públicas que protejan esta especie y otras que contribuyan directa e indirectamente a la polinización. Lamentablemente, la Sala Penal del Tribunal de Cartagena revocó precisamente en el Día Internacional de las Abejas el fallo que con ansias se esperaba se ejecutara con éxito.
“Colombia reconoce la polinización como un servicio ecosistémico estratégico en razón al papel clave que desempeña para la conservación de la diversidad biológica, el mantenimiento de la estructura y función de los ecosistemas, la producción de alimentos y la economía mundial”, señala el Instituto Humboldt.
Es precisamente desde el rol valioso de especies que contribuyen a estos procesos que el año pasado nace la Iniciativa Colombiana de Polinizadores la cual reunió a diferentes entidades para realizar un diagnóstico sobre el panorama de estos animales y hacer un llamado al país para que reconozcan que sin ellos, estaríamos en graves problemas.
Toda esta información se encuentra ya contenida en un libro dentro del repositorio del Instituto Humboldt, el cual debe funcionar como una guía básica de conocimientos de las especies polinizadoras. Primeramente, se encuentra una introducción que permite conocer cada uno de los servicios de las abejas, los colibríes, murciélagos, moscas, mariposas, oso de anteojos, entre otros.
Segundo, como ha funcionado la iniciativa de cuidar estos animales en otros países, en los cuales el proceso no ha sido rápido para lograr políticas públicas que funcionen a favor de estos, pero que hoy garantizan una base sólida de información que funcionan como sustento para exigir garantías para estos animales, y por supuesto, para la vida humana.
Y tercero, ejes temáticos enfocados al monitoreo y evaluación de las especies, fortalecimiento y capacidades de la población, promoción de hábitats saludables y la incorporación política en cuanto a la toma de decisiones. Se trata de un material que vale la pena revisar y compartir con estudiantes, población rural, el Senado y el Congreso del país, para poner en marcha planes de acción. Para obtener este material da click aquí.
Por: Daimer Fernando Losada Bermeo. Periodista. Editor: Lina María Serna. Periodista – Editora.
Colombia es uno de los países con más riqueza natural y cultural del mundo, en cada una de sus regiones conserva una amplia variedad de tradiciones, saberes, visiones y propósitos que han hecho resistencia a la modernidad y sus determinaciones. No obstante, existen realidades muy comunes a lo largo del país que aún son desconocidas o poco mencionadas.
Ante esa falta de atención y reflexión, Retina Latina, una plataforma digital de difusión, promoción y distribución del cine Latinoamericano se ha encargado de compartir con todo el público de la web de forma gratuita aquellas historias y relatos que muy poco se conocen, y que gracias al esfuerzo y dedicación de ciertos productores, hoy están disponibles para el disfrute de todos.
Desde el 05 de junio del presente año se podrán encontrar en esta plataforma siete cortometrajes que retratan de una forma distinta algunas de esas realidades poco mencionadas del país, y que aunque podrían parecer casos muy simples por su cotidianidad, están hechos para la reflexión y la producción de conocimiento. El lanzamiento oficial de este ciclo cinematrográfico se llevara a cabo en el marco del BOGOSHORTS sessions en el Cine Tonalá ubicado en Bogotá.
Reflejando la niñez colombiana y las situaciones que se llegan a presentar en esta etapa de la vida, llega desde Norte de Santander “3 pies” de Gisselle Geney; que narra la pasión de un niño de 10 años por su balón de fútbol. Así mismo, desde el departamento de Antoquia se presenta “Tierra al viento” de Juan Restrepo Molina, que cuenta la historia de una niña que mientras descubre el campo en compañía de su abuelo debe enfrentarse a los azares del destino y sus consecuencias.
Desde el departamento de Risaralda, realizado por Sebastián Valencia Muñoz está “Montañas” que retrata el encuentro de un niño guerrillero y un niño campesino que deciden huir juntos de la guerra en medio de los Andes colombianos. Y en esta misma línea desde Córdoba se encuentra “Elena” de Jesús Reyes, que cuenta la historia de una madre piadosa que rescata a un joven herido en combate, quien pertenece al grupo paramilitar que le quitó la vida a su hijo tiempo atrás.
Por otro lado “Zapatillas” de Mónica Hernández presentado desde Boyacá hace referencia al amor desde la historia de un joven que debe tomar una difícil decisión que pone en polos opuestos a la persona que quiere y a la pasión de su padre, el ciclismo. Finalmente desde Valle del Cauca llega “Andrea” de Laura Puerta, que muestra el reencuentro de dos viejas amigas con un fuerte vínculo y “Porfía” de Fanny Aparicio, que cuenta la historia de una mujer solitaria que cambia su vida por un ritual mágico.