Hoy se presentará una ponencia ante la Corte Constitucional de Colombia, en donde el magistrado Alberto Rojas, expone serias razones por las que se solicitará la revisión de las licencias de los pozos petroleros que se encuentran en inmediaciones al municipio de Teteyé y otros corregimientos en donde habitan comunidades indígenas como la comunidad Awa.
Por: Periódico El Campesino
La explotación petrolera en el departamento del Putumayo inicio a mediados de la década de los ochenta, en la región viven decenas de comunidades indígenas que han visto como la exploración y explotación de hidrocarburos han causado graves daños a los ecosistemas y sobre todo a la salud de los indígenas.
Según informó el diario EL ESPECTADOR en su portal digital, la ponencia del Magistrado Rojas, defiende la tutela interpuesta por el gobernador del cabildo indígena Awa la Cabaña, Juvencido Natascuas, en donde pone en conocimiento de la justicia como las empresas privadas que actualmente tiene el control sobre varios pozos en cercanías de los resguardos, han puesto en peligro la vida de las indígenas, así mismo la tutela señaló que nunca se realizó la consulta previa a las comunidades para poder realizar la extracción de petróleo en sus territorios ancestrales.
Según la ponencia que será presentada hoy ante la Corte Constitucional, existen serios problemas de orden social y jurídico, el documento hace referencia al concepto realizado por la Defensoría del Pueblo, en donde expone la grave situación humanitaria de al menos 90 personas que viven en situación de extrema pobreza.
En el informe de la entidad humanitaria se destaca la persecución a la que han sido sometidos los hombres y los jóvenes indígenas Awa que habitan en las inmediaciones de los pozos por parte de algunos miembros del Ejército, se señala por ejemplo que algunos indígenas han sido obligados de quitarse la ropa en su totalidad para así identificar si presentaban marcas por el porte de armamento de largo alcance, así mismo el Magistrado Rojas le contará a la Corte, que a algunos menores de edad fueron engañados con billetes falsos para que se diera información sobre si en su comunidad habían presuntos guerrilleros. En la ponencia también se hace referencia a los graves daños al ecosistema y a la salud de los nativos, pues según la investigación los peces y el agua presentan sabor a petróleo, lo que ha causado problemas de salud en la comunidad.