El municipio de Madrid en el departamento de Cundinamarca, se encuentra ubicado en la Sabana de Bogotá. Actualmente se proyecta como una ciudad emergente, puesto que el acelerado crecimiento poblacional y el avance industrial que ha venido experimentando en los últimos años, lo han convertido en un referente económico de la región. Le puede interesar: Un taller para aprender a diseñar una huerta ecológica
Sin embargo, ante las diversas transformaciones urbanas y la llegada de más pobladores con el pasar del tiempo, el municipio sigue conservando su esencia como territorio rural. Y es que, en Madrid, a pesar de que más del 80% de su población se encuentre localizada en el casco urbano, se cuenta con más de 16 veredas que ocupan, aproximadamente, el 80% de su extensión territorial total, según cifras de la Corporación Autónoma Regional- CAR.
Es tal la relevancia que tiene el rol de la agricultura en este municipio cundinamarqués, que, en gran medida, es el sector primario el gran protagonista del crecimiento económico local. Y es que, por ejemplo, además de que Madrid es considerado como el mayor municipio floricultor del país, en este pueblo también se producen grandes cantidades de papa, variedad de hortalizas, maíz, y algunos frutales, tal como lo expone el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural.
Iniciativas rurales que llegan a la ciudad
Es por ello que, como forma de demostrar la gran importancia que tiene el sector agrícola para el municipio, desde hace dos años la Alcaldía de Madrid, en cabeza de su dirigente municipal, Orlando Cardona, y a través de la Secretaría de Desarrollo Económico y Ambiente, se viene ejecutando un proyecto innovador como una manera de integrar el campo a la ciudad: el programa Huertas Urbanas.
ElCampesino.co fue al municipio de Madrid para conocer de primera mano esta iniciativa rural y urbana que se viene desarrollando allí. Para saber acerca de todos los detalles, trayectoria e impacto de este proyecto municipal, hablamos con Juan Pablo Martínez, tecnólogo agropecuario y coordinador del programa Huertas Urbanas.
Como la mejor forma de enterarnos sobre todo lo que significa esta iniciativa madrileña, conversamos con el funcionario municipal, mientras lo acompañábamos a realizar un recorrido de visitas técnicas por algunas de los huertos que se encuentran localizados en diferentes barrios del municipio de Madrid.
Huertas comunitarias como incentivo de la agricultura local
Martínez, quien viene trabajando en la supervisión y organización de esta iniciativa, señaló que Huertas Urbanas es un programa que tiene como fin incentivar la actividad agrícola local, fomentar el cuidado del medio natural y dar a conocer lo beneficioso que puede llegar a ser producir alimentos de una manera orgánica.
Además. manifestó que este proyecto está dirigido a instituciones educativas como jardines escolares y escuelas de primaria, hogares geriátricos, centros de ayuda para personas en condición de discapacidad y diferentes fundaciones que acogen población vulnerable.
Juan Pablo Martínez nos contó detalladamente cómo es que las huertas urbanas manejan una dinámica especial de funcionamiento. En primera instancia, mediante la gestión de la Secretaria de Desarrollo Económico y Ambiente de la Alcaldía de Madrid, se adecúa el espacio en el cual se plantará el huerto, y posteriormente se siembran los primeros productos con la asistencia de los usuarios que, después de la primera cosecha, se encargan de velar por el cuidado y la productividad de cada huerta.
Es así como mediante este ejercicio pedagógico que profesores, directivos, padres de familia y niños, se convierten en “agricultores urbanos” y se logran apoderar de las huertas como una manera de contribuir con el desarrollo de la producción de alimentos saludables. Además, Martínez resaltó que el proyecto tiene todo un enfoque comunitario, ya que cada institución, fundación y centro de ayuda se queda con las cosechas producidas, y estos productos pueden ser utilizados para beneficio propio o fines comerciales.
Agricultura y productividad de la mano
Por otra parte, el coordinador del programa explicó que los productos que se siembran en las 21 huertas urbanas (19 en el casco urbano del municipio y 2 en la zona veredal), son hortalizas de corto ciclo como: lechuga, brócoli, espinaca, coliflor, acelga (amarilla, blanca, morada); además de plantas aromáticas como la yerbabuena y la manzanilla. Estos productos se obtienen en un tiempo estimado entre 38 y 42 días, lo cual beneficia a los usuarios porque así se pueden producir varias cosechas a lo largo del año.
Este programa trabaja con diferentes tipos de huertas, tales como: cajones productivos, huertos en suelo y las huertas hidropónicas (que son hidrotúneles con geomembrana plástica). Estos diferentes sistemas, según los gestores del programa, facilitan el funcionamiento de las huertas, teniendo en cuenta los diversos factores externos de producción.
Desarrollo comunitario y ecológico al servicio de todos
Por otro lado, en el recorrido por las diferentes huertas en el municipio, El Campesino.co logró conversar con algunos de los participantes de esta iniciativa. En primer lugar, hablamos con Johana González, profesora del Centro de Desarrollo Infantil Transformación en Marcha Sede B, quien destacó que este proyecto ha sido de gran beneficio para los niños, pues son ellos quienes se interesan por sembrar y cuidar de las plantas en el huerto, pues así aprenden a cuidar y conservar el medio ambiente de una manera interactiva.
En el Hogar Infantil Serrezuela, la profesora Blanca Bernal, nos explicó que la iniciativa de la huerta ha sido de gran impacto para los infantes del centro educativo, pues los niños y padres de familia se involucran directamente en la siembra y cosecha de lechuga y plantas aromáticas que están distribuidas en el huerto. Según la docente, es una iniciativa que acerca a los niños a actividades ecológicas desde temprana edad y esto es importante para su desarrollo personal y social.
Por último, en el Hogar La Candelaria, un centro geriátrico ubicado en el centro del municipio, la directora Blanca Ayala señaló que, gracias a esta iniciativa, el huerto se ha convertido en un espacio de integración para los adultos mayores, quienes al participar de este proyecto se sienten motivados, activos y útiles al colaborar con la siembra, cuidado y cosecha de los diferentes productos.
Además, la funcionaria señaló que los adultos mayores participan brindando sus conocimientos agrícolas, pues muchos de ellos vivieron en el campo la mayor parte de su vida y sus saberes empíricos sobre agricultura los motiva a cuidar de la huerta, lo cual se convierte en un aporte emocional para ellos.
Finalmente, en el término del recorrido por las huertas, Juan Pablo Martínez, expresó que esta iniciativa local ha favorecido a la ciudadanía madrileña. Además, dice sentirse orgulloso de su labor como coordinador de Huertas Urbanas, ya que según él, con su trabajo puede aportar diariamente al desarrollo ecológico, comunitario y agrícola de su municipio.
Por: William Felipe Espitia. Periodista.
Editor: Lina María Serna López. Periodista.