Por primera vez Colombia es sede de un evento que reunirá a los observadores de aves a nivel mundial. El comité organizador del evento estimó que Colombia es un país megadiverso en riqueza natural, humana, ambiental y cultural.
Además, la ubicación geográfica de Manizales dejó en alto la biodiversidad del país, teniendo en cuenta que la capital caldense limita con los municipios de Chinchiná, Villamaría y Neira, los cuales son puerta de entrada a diversos ecosistemas de bosques secos, húmedos, tropicales y páramos, lugares con alta densidad de avifauna, paisajes exuberantes y potencial de aviturismo.
Durante los 6 días, la programación de la feria tuvo salidas para la observación de aves, talleres de ilustración naturalista, así como foros sobre prevención de extinción y conservación de aves en el posconflicto. Le puede interesar: SiembraFest, un festival de cine para la participación rural en Cundinamarca
El evento contó con la participación de 30 expertos invitados quienes se encargaron de adelantar charlas, foros, simposios, talleres y conferencias. Así como con la participación de 25 países invitados.
El evento contó con el apoyo de Cotelco – Asociación Hotelera y Turística de Colombia, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, así como patrocinadores locales, regionales y gubernamentales.
Por: Lina María Serna. Periodista – Editora.