Por: Miguel Ángel Arango – Facilitador Escuelas Digitales Campesinas Chocó
El litoral Pacífico Chocoano, considerado un paraíso colombiano, fue visitado por el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Luis Gilberto Murillo, hijo del Chocó. El Ministro, además de hacer el anuncio acerca de proyectos de paz y conservación, firmó la iniciativa de «Recuperación y manejo ambiental para la construcción de paz en Bahía Solano y Nuquí».
Murillo, quien propuso mayor articulación entre administraciones para implementar proyectos de desarrollo social y económico, participó también en esa localidad en una jornada de limpieza en la playa, en el marco de la campaña «Limpiemos Colombia». «La comunidad en Bahía Solano, Nuquí y en toda la costa pacífica colombiana ve que realmente puede avanzar en su estrategia de desarrollo económico», dijo el Ministro.
Entre las iniciativas que el Gobierno colombiano espera materializar con sus proyectos, está la construcción de una planta de tratamiento y aprovechamiento de residuos sólidos para el municipio de Solano, en Nuquí; ya se está avanzando en un proyecto de reciclaje y protección de playas para garantizarle a las zonas hoteleras un beneficio a sus usuarios.
Sin embargo, es preocupante que la gran mayoría de estas iniciativas no llegan a feliz término, por ejemplo, en el municipio de Nuquí existe un grupo de estudiantes llamado GENGA, (Grupo ecológico de Nuquí guardianes ambientales) liderados por la bióloga y ahora educadora. Enny Luz González Valencia, quienes se preocupan de una manera intensa por la protección y conservación de bosques y playas del municipio, teniendo en cuenta que esta organización no cuenta con recurso alguno, hace hasta lo imposible por incrustar en el chip humano de los habitantes de Nuquí la necesidad de proteger el medio ambiente, y realmente lo logran, aunque en un pequeño porcentaje.
¿Qué sería de Nuquí, sí al grupo GENGA le asignaran un proyecto de esta categoría con los recursos necesarios para educar, proteger y reciclar?, sin lugar a dudas en un corto plazo podríamos estar hablando de un verdadero paraíso en el Pacifico, pues para nadie es un secreto que lo que más necesitan estos pueblos Chocoanos es educación y menos asistencialismo estatal, lo que se necesita es entregar las herramientas desde el conocimiento para lograr un pueblo productivo, pero preocupado por su entorno y por el legado que le dejaran a las futuras generaciones de habitantes rurales del Pacifico Chocoano.
La comunidad de Nuquí hace el llamado al Ministro Urrutia hijo del Chocó, para que estudie esta posibilidad, un proyecto de conservación ambiental en manos de una organización como esta que es experta en el tema garantiza el éxito del proyecto en todo el sentido de la palabra pues involucra a toda la comunidad desde el más chico con capacidades de acción, hasta el más viejo con capacidad de enseñar.