De acuerdo con el presidente ejecutivo de Fedepalma, Jens Mesa Dishington, aunque el sector palmero en Colombia en producción de fruto aumentó el último año alrededor del 7 % y las áreas sembradas solo registraron un crecimiento de 1.5 %, existe preocupación por la baja siembra y al inseguridad jurídica en las tierras, lo que no ha permitido inversión extranjera en el país.
Tomado de: Infoagro/Sulam Hatum
Según el Funcionario, la palma de aceite es un cultivo de tardío rendimiento que se debe mirar desde diferentes posiciones entre las que está la producción del fruto y el número de áreas sembradas.
“Lo que está sucediendo actualmente es el reflejo de la situación económica de los palmeros. El problema en particular es la inseguridad jurídica que existe en Colombia principalmente en inversiones a largo plazo, lo que impide el desarrollo de proyectos en ciertas zonas. Sabemos de inversiones que se han paralizado y de algunos proyectos de inversión extranjera, que se reevaluaron por estos problemas”, explicó Mesa Dishington.
Por esto, Fedepalma, hace un llamado al Gobierno Nacional y al Congreso de la República para avanzar en la construcción del marco jurídico de la propiedad de la tierra en Colombia, lo que permitirá una seguridad y estabilidad para los inversionistas extranjeros.
Datos de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, registran que actualmente Colombia es el primer productor de aceite de palma en América y el cuarto en el mundo, siendo un sector que genera empleos y negocios inclusivos para pequeños y medianos productores.