El SI y el NO de las negociaciones con las FARC
Por: Carlos Arturo Leiva Perilla, facilitador EDC- Boyacá
Mientras el país se recupera de una de las decisiones más importantes de su historia reciente, el NO en las urnas a los acuerdos firmados con las FARC en La Habana, el país se prepara para enfrentar la decisión de la ciudadanía por un poco margen y teniendo en cuenta que los que acudieron a las urnas no superaron el 40% del potencial electoral en Colombia.
El gremio del sector turístico expreso su intranquilidad a través de sus representantes.
“El No nos llevó a una situación un poco complicada, en la medida en que se genera mucha incertidumbre a cuenta de qué va a pasar con el proceso de paz”, aunque aclaró que es muy prematuro pensar en afectaciones económicas en el sector. El poder ejecutivo también se mostró expectante ante el resultado de las conversaciones que adelantan desde el pasado lunes los representantes del No y del gobierno nacional.
El Valle de Tenza apoyó y de manera general al Sí al igual que en el departamento de Boyacá, esta aceptación de los votantes en esta parte del país fue escasamente superior al NO, lo que muestra que el desacuerdo y acuerdo esta por alrededor del 50% por cada bando.
Es preocupante este tipo de votación ya que muestra una marcada polarización del país que lo dividió completamente en dos bandos por igual.
La desinformación y la no lectura de lo que se había pactado en La Habana con las FARC hicieron que se diera este tipo de votación.
Lo que sí es notorio es que sus resultados son el espejo de un país que tiene profundas diferencias entre el centro y la periferia, y entre quienes ven los acuerdos como una oportunidad o como una amenaza a sus intereses
Finalmente es concluyente que el debate y los intereses que se muevan a partir de las elecciones no solo corresponde a los líderes de campaña y los políticos sino también a los colombianos que somos los directamente afectados por el conflicto, tengamos en cuenta que “la victoria del No es una fuerte dosis de realismo en un país polarizado, fragmentado y desigual, que tiene ahora la tarea de encontrar una manera viable para construir paz en medio de profundas y persistentes diferencias”.
*Este es un texto generado a partir del trabajo de las Escuelas Digitales Campesinas de Acción Cultural Popular- ACPO, que buscan promover el liderazgo del campesinado colombiano a través de procesos de educación, formación y capacitación, orientados a su dignificación, inclusión y desarrollo.
