Un proyecto impulsado desde la administración municipal con apoyo de CVC ha promovido la reconversión de fogones de carbón a hornos que funcionan a gas. Las personas que se dedicaban a la fabricación de productos hechos en fogones de carbón ya están implementando dicha práctica que resulta ser menos nociva para el medio ambiente.
Por: CVC
En el Dovio, quienes tradicionalmente trabajan con fogones de carbón, como por ejemplo quienes viven de las ventas de arepas, tan populares en el desayuno de muchos colombianos, están descubriendo que cambiarse al gas no solo les resulta más económico, sino también más saludable para el ambiente. Se trata de un proyecto impulsado desde la Administración Municipal con apoyo de CVC.
Para llevar a cabo dicha iniciativa, se desarrolló todo un proceso educativo con los comerciantes del Municipio, ante el tema de la explotación de carbón vegetal y la normatividad requerida para el desempeño de dicha actividad.
“Hemos venido haciendo un trabajo de años atrás en cuanto al tema de educación ambiental en diferentes líneas, obviamente la más fuerte ha sido el aprovechamiento del tema de maderas y en el recurso bosque. Se tenía identificado que se comercializaba de manera ilegal y que en muchos casos no se contaba con el permiso de la autoridad ambiental.
La gente entonces empezó a entender que necesitaba autorizaciones para estas actividades y a comprender la afectación que hacían a sus recursos naturales”, manifestó Janeth Alexandra Perea, Técnica Operativa de la CVC DAR BRUT.
De esta forma, en diferentes espacios se ha convocado a los trabajadores que utilizan carbón en la fabricación de sus productos, para tratar de concientizarlos sobre la importancia de cuidar y proteger los bosques. Y adicionalmente a las capacitaciones, el proyecto brindó un subsidio económico de 250 mil pesos a cada beneficiario para la compra de los hornos a gas.
“Actualmente tenemos 28 inscritos en el proyecto, pero esperamos que sean más.
La idea es que todos los que tienen esta actividad económica y trabajan con carbón se reconviertan a gas pues así vamos a reducir mucho el impacto en cuanto al tema ambiental y por supuesto, con relación a las condiciones de salud de las personas que a diario se exponen al humo nocivo de sus fogones” expresó César Henao Vélez, Director de la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria – Umata.
Tras los cambios los beneficiarios se sienten satisfechos y lo ven reflejado tanto en su salud como en sus finanzas. “Para mí ha sido un gran beneficio, porque me ha salido más económico, antes en la semana se me iban tres bultos de carbón que me valían 75 mil pesos y ahora con el gas, un cilindro de 35, me dura hasta diez días y me vale 40 mil, además de eso termino menos acalorada”, reveló Gloria Inés Castrillón, comerciante del barrio Las Colinas de El Dovio.