Por esta época los alcaldes municipales y campesinos de todo el país se reúnen para definir los Planes de Desarrollo de los próximos cuatro años. Es importante que todos participen en la elaboración, seguimiento y evaluación de este documento.
Por: Nelson David Ruiz Guzmán
Facilitador de las EDC de Cundinamarca
Campesinos de todo el país y acaldes municipales se están reuniendo para formular el Plan de Desarrollo Municipal.
La Constitución Política de 1991 y la Ley 152 de 1994 establecen que cada gobernación y municipio deben contar con un Plan de Desarrollo, cuya elaboración es responsabilidad y obligación constitucional y legal de los alcaldes, alcaldesas, gobernadores y gobernadoras de todo el país.
Siendo el campo uno de los pilares de la economía del país, es importante que los campesinos atiendan el llamado de los mandatarios locales y participen de manera efectiva en la formulación de su respectivo Plan de Desarrollo. Para facilitar ésta labor es importante conocer a qué se enfrentan los campesinos cuando son llamados a debatir sobre las necesidades de sus comunidades.
En primer lugar, el Plan de Desarrollo es para el municipio y para los campesinos la carta de navegación y el principal instrumento de planeación para su desarrollo integral.
En segundo lugar, es un instrumento político y técnico, construido de forma democrática y pluralista, donde se concretan las decisiones, acciones, medios y recursos para promover el bienestar integral de los campesinos y la población en general, garantizar los derechos humanos, y fortalecer la democracia participativa.
Por ende, la validez de un Plan de Desarrollo se da por la participación de todos los sectores. En el área rural los campesinos son uno de los actores más importantes; destinatarios de la capacidad institucional y quienes conocen la magnitud de las demandas de bienes y servicios a satisfacer, y el potencial laboral para la economía con miras al desarrollo integral del territorio y de las personas que lo habitan
En tercer lugar es un instrumento que debe ser evaluado periódicamente. Con ello los campesinos garantizan que las acciones y recursos destinados a la solución de las necesidades identificadas se ejecuten en el tiempo previsto en cada Plan de Desarrollo Municipal.
Para evaluar se cuenta y se complementa con los mecanismos de participación y control de la ciudadanía, a los que pueden acceder los campesinos: rendición de cuentas, veedurías ciudadanas, Consejos Territoriales de Planeación, auditorías visibles, entre otros, que sirven para garantizar el cumplimiento de las competencias y de los compromisos adquiridos con la ciudadanía.
Por último, los campesinos deben procurar que en todos los procesos de planeación, seguimiento y evaluación del Plan de Desarrollo se incluyan los temas de su interés, tales como protección social, salud, educación, justicia, medio ambiente y vivienda.
Con ello se buscará que el territorio en el que se habita sea un lugar sostenible, y que el trabajo de los funcionarios públicos esté sustentado en el cumplimiento de las metas, objetivos e indicadores preestablecidos.