“Se necesitan con urgencia modelos de crecimiento urbano más sostenibles”, afirmó Hiroto Mitsugi, subdirector general de la FAO, al frente del Departamento Forestal, en la inauguración del encuentro.
“Las ciudades actuales y futuras –añadió- deben planificar y diseñar espacios verdes y bosques urbanos para satisfacer diferentes intereses y necesidades, proporcionar los servicios ecosistémicos requeridos por una sociedad urbana en crecimiento y mejorar la continuidad entre el espacio rural y el urbano”.
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Mitsugi pidió también a los participantes apoyar un conjunto de soluciones forestales urbanas -presentadas en el foro y enumeradas más abajo- destinadas a crear ciudades más verdes y saludables.
El Foro –Cambiar la naturaleza de las ciudades: el papel de la silvicultura urbana para lograr un futuro más verde, saludable y feliz– es organizado por la FAO, el Ayuntamiento de Mantua, la Sociedad Italiana de Silvicultura y Ecología Forestal (SISEF) y el Politécnico de Milán.
El evento ofrece una plataforma para compartir ejemplos positivos de planificación, diseño y gestión de bosques urbanos en todo el mundo, y una oportunidad para reafirmar los compromisos de los participantes para aprovechar los beneficios de los bosques.
El foro cuenta con más de 600 participantes -alcaldes, académicos, silvicultores, paisajistas y urbanistas de más de 50 países- en un evento que se celebra del 28 de noviembre al 1 de diciembre.
¿Por qué invertir en bosques urbanos y espacios verdes?
Las ciudades ocupan solamente un 3% de la superficie del planeta, pero consumen el 75% de sus recursos naturales. Más de la mitad de la población mundial vive en ciudades, y se prevé que este porcentaje aumente hasta casi el 70% en 2050. Al mismo tiempo, se estima que la demanda de agua en zonas urbanas podría duplicarse.
“La expansión de las ciudades suele producirse sin una planificación adecuada del uso de la tierra y la presión humana resultante tiene efectos muy perjudiciales para los paisajes naturales y agrícolas en las áreas urbanas y sus alrededores”, advirtió Mitsugi.
Teniendo más en cuenta las soluciones forestales en la planificación urbana, los bosques y los espacios verdes pueden valer para abordar diversos desafíos.
Permiten eliminar contaminantes nocivos, reducir el ruido, mejorar las temperaturas, mitigar los efectos del cambio climático, suministrar distintos productos y energía renovable, proteger las fuentes hídricas y prevenir la erosión del suelo y las inundaciones.
Por ejemplo, los árboles pueden reducir las necesidades de aire acondicionado en un 30 por ciento, si se colocan en forma adecuada alrededor de los edificios. En climas fríos, pueden proteger a las casas del viento y ahorrar entre un 20 y un 50 por ciento de la energía utilizada para calefacción. Un árbol frondoso puede absorber hasta 150 kg de CO2 al año, ayudando así a mitigar el cambio climático.
Las áreas verdes pueden también tener un efecto positivo para la salud y el bienestar de la población y ayudan a crear sociedades más cohesionadas.
¿Cómo crear ciudades más verdes?
Los organizadores del foro realizaron un llamado para que se actúe, presentando un conjunto de soluciones forestales para ser respaldadas por los participantes. Entre ellas se incluyen:
- Ampliar la cubierta vegetal en las ciudades, utilizando el árbol adecuado en el lugar apropiado;
- Desarrollar agendas políticas que promuevan espacios verdes y bosques urbanos;
- Realizar un seguimiento periódico del efecto de las islas térmicas en las ciudades para planificar estratégicamente los bosques urbanos;
- Utilizar las directrices técnicas existentes para planificar, diseñar y gestionar los bosques y los árboles urbanos;
- Crear y fomentar empleos verdes y oportunidades económicas;
- Convertir zonas abandonadas, solares y patios en espacios verdes;
- Promover las huertas comunitarias, la agricultura urbana y los bosques urbanos que permiten obtener alimentos;
- Aumentar el número de edificios verdes y bosques verticales y fomentar la construcción de techos verdes.
Por: Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.