El aguacate es originario de Centroamérica, especialmente de México, Perú y Guatemala. Es una fruta pero por no tener dulzor, algunos la consideran una hortaliza.
Por: Sor María Rojas P. Estudiante EDC. de Medellín
El aguacate tiene múltiples beneficios para la salud. Entre la cantidad de vitaminas que proporciona el aguacate está la vitamina E, que es antioxidante y ayuda a combatir los radicales libres; el contenido de vitamina D, favorece la absorción del calcio y fósforo; tiene vitaminas del complejo B, que fortalece el músculo cardiaco. Los ácidos grasos mono insaturados del aguacate controlan el colesterol y los triglicéridos y previene la arteriosclerosis; esto ayuda a los diabéticos porque equilibra el azúcar en la sangre, ayuda a combatir el estreñimiento por su contenido de fibra. Contiene omega 3, 6, 7 y 9; sodio, potasio y zinc.
El aguacate había perdido cierto prestigio, pero ahora se le devuelven sus bondades. Hipócrates, el padre de la medicina decía: “Que tu medicina sea un alimento y que tu alimento sea una medicina”.
También tiene efectos positivos para la belleza. El aguacate es un aliado para el cabello, la piel y las uñas, es antiarrugas (en mascarilla), fortalece los músculos del abdomen rebajando la pancita, favorece la formación del colágeno y combate el envejecimiento, ayuda a combatir la dermatitis y los granos de la piel. Estos tratamientos con aguacate son de paciencia y constancia.
En la alimentación, como es fuente de fibra favorece la digestión. Las grasas del aguacate son insaturadas por lo tanto lo pueden consumir los que tienen colesterol alto y triglicéridos. Es una buena fuente de carbohidratos pero en especial de fibra, por lo que se recomienda para deportistas, embarazadas y personas con fuerte actividad física. Se aconseja comer al menos dos aguacates por persona semanal. El aguacate produce saciedad, da plenitud y quita el hambre.