En la vereda de Agua Bonita antes conocida como Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) Héctor Ramírez, ubicado en el municipio La Montañita, Caquetá, residen campesinos y firmantes del acuerdo de paz, que con el paso del tiempo y la convivencia diaria, se han unido como comunidad.
Los pobladores de la vereda, emprendieron el proyecto de mejorar y ampliar su biblioteca con diferentes espacios lúdicos y de aprendizaje. Con esta iniciativa, se espera beneficiar aproximadamente a 90 niños, niñas y jóvenes que residen no solo en la vereda, sino también en las comunidades cercanas.
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La Biblioteca Popular Alfonso Cano, fue construida en el año 2017 como una respuesta a la carencia de espacios educativos y recreativos para los niños, niñas y jóvenes de la zona rural de este territorio. Además, se buscaba el fortalecimiento de las alternativas para acceder y construir conocimiento en relación con las dinámicas del territorio y las necesidades comunitarias.
Este espacio que cuenta con 55 metros cuadrados, es ocupado por los libros que los firmantes del acuerdo de paz llevaron durante la guerra, junto a otros que les llegaron de donaciones, y 18 computadores. Allí los estudiantes acuden a hacer sus tareas o a recibir asesorías para llenar las guías del colegio, pero además ha sido un lugar indispensable para que las personas que están en programas de educación a distancia o validación del bachillerato, continúen con sus procesos de formación.
El crecimiento del pueblo y la educación virtual como consecuencia de la pandemia, evidenciaron la falta de espacios adecuados para aquellos que asisten allí. Entre las dificultades presentadas se encuentra que su capacidad es solo para 18 personas, gran parte de los libros fueron guardados en bodegas para acomodar adecuadamente los computadores y no cuenta con buena ventilación.
Por esta razón, en el marco del proyecto Educaré (Educación, Campo y Reconciliación) liderado por la Facultad de Psicología de la Universidad de La Sabana y la comunidad de Agua Bonita, que busca fortalecer los procesos de enseñanza con un enfoque comunitario participativo, se implementó la iniciativa de recolectar fondos para ampliar la biblioteca.
Con el propósito de garantizar espacios educativos y culturales apropiados, se puso en marcha una «Vaki» a través de la cual se busca construir 120 metros cuadrados más, para una ludoteca con materiales y juegos adecuados, una sala de reuniones y de cómputo, y estantes con todos los libros organizados. Además, se espera habilitar una emisora comunitaria, una papelería, una galería de la memoria sobre las antiguas Farc, adecuar la ventilación y poner en funcionamiento paneles solares.
Aunque el proyecto cuenta con el apoyo económico del Fondo Multidonante de las Naciones Unidas, los recursos no son suficientes para conseguir los materiales de construcción y la mano de obra. Por ende, a través de la «Vaki» que es una plataforma de “Vacas en línea» o recaudo colectivo, se espera alcanzar la meta de $60.000.000 a finales de marzo para que esté lista en mayo.
El proyecto se estableció hasta mayo, debido a que es el mes en el que se lleva a cabo el Festival de Grafitti “Agua Bonita se pinta de colores” y dentro de los planes de la comunidad, está realizar un gran evento para reconocer este proyecto. Además, se espera que el espacio pueda ser pintado en el marco del festival.
Para apoyar la ampliación de la Biblioteca Popular Alfonso Cano, puede ingresar a este link: https://vaki.co/es/vaki/bibliotecapopular.
Por: Isabella Durán Mejía. Periodista.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.