En el marco del Día Nacional del Periodista celebrado cada 8 de febrero, resaltamos la importancia de esta labor en la búsqueda de garantizar el acceso a la información, la libre expresión y la construcción de una sociedad que respete todas las formas de vida. Por eso entendiendo el periodismo desde su esencia, reconocemos que para ejercer se requieren elementos que van más allá de un título universitario.
Teniendo en cuenta que Colombia es un país históricamente marcado por la guerra y el abandono estatal, la reportería desde los territorios resulta más que necesaria. Pues aunque la digitalización nos de una impresión de conocimiento, aún hay mucho por contar.
Un Reportero Rural de corazón
Oriundo de Bogotá y criado entre la majestuosidad de los paisajes chocoanos, Miguel Ángel Arango Cifuentes señala que sus pasiones hacen parte del legado de sus padres, la docencia por su madre y el servicio social por su padre. Y pese a que es odontólogo de profesión, nunca le ha faltado el tiempo ni las ganas para hacer reportería.
“Empecé escribiendo en 1998 en un semanario que se llamaba Chocó 7 días y empezó a apasionarme tomar una foto, preguntarle a la gente y estar en el momento indicado. Era importante escuchar qué le dolía a la comunidad para poderlo transmitir y que ese mensaje llegara a otras personas tocándoles el corazón”.
Con tal entusiasmo recuerda cómo descubrió su interés por comunicar y fortalecer sus conocimientos y habilidades en este campo. Hace 9 años conoció Acción Cultural Popular – ACPO y exactamente en el 2013 fue cuando inició a trabajar en esta organización cuyo objetivo es contribuir al desarrollo integral del campo colombiano.
En este nuevo escenario encontró el camino para enseñar desde distintos proyectos que le permitieron servir de guía y compañero para muchos habitantes rurales del país, y en ese andar se convirtió en “corresponsal del periódico El Campesino”. Así se presenta en territorio cuando está en proceso de construcción de un artículo, esos textos que aunque requieren de ciertas pautas, él ya sabe cómo y con qué enfoque hacerlos.
Para Miguel, ser un reportero rural significa “ ser la voz del pueblo” pues este recorrido empírico le ha mostrado la relevancia que tienen las comunidades y el territorio, y la urgencia de visibilizar las situaciones positivas y negativas que se viven a diario en Colombia y que no son de gran interés mediático para los canales tradicionales.
Desde su experiencia, saberes y conocimientos adquiridos, este Reportero Rural nos comparte unos tips para hacer reportería desde los territorios y nos invita diciéndonos:
“La importancia del reportero rural es la importancia de la verdad”
Por: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.