La mujer a través de los tiempos siempre ha tenido un papel muy importante en la sociedad, cuando se encargaban de la cosecha y recolección de alimentos, además del cuidado de la familia y las labores de la casa.
Con el pasar de los años muchas mujeres han librado diferentes batallas demostrando sus capacidades y lo mucho que le pueden aportar al mundo, más allá de lo que culturalmente se les ha venido imponiendo; son luchadoras incansables que día a día se vienen preparando, ganan espacios de participación y buscan cambios en la sociedad que les garanticen la igualdad de género.
Es importante visibilizar el trabajo que vienen desarrollando las mujeres de la comunidad y las mujeres reincorporadas residentes en la región de El Pato, en el municipio San Vicente del Caguán, Caquetá. Se puede observar que en este momento las mujeres están mejor preparadas, tanto para prevenir como para enfrentar las diferentes situaciones de la vida, siempre se cuenta con el apoyo de ellas para lograr todas las metas y sueños que tienen las familias en su proyecto de vida y las organizaciones campesinas en sus programas de desarrollo rural.
En la región de El Pato se cuenta con el apoyo de todas las mujeres para el fortalecimiento y el empoderamiento del trabajo en equipo, a través de todas las formaciones realizadas por el Proyecto MIA, se han construido buenos canales de comunicación.
Ha sido un escenario de reflexión donde se viene implementando un modelo de educación a través del manejo de las tics en la plataforma digital de Escuelas Digitales Campesinas; sus dinámicas y habilidades han permitido que las mujeres piensen en organizar un proyecto de vida en el campo.
Para mi como facilitadora ha sido una experiencia muy bonita, trabajar con mujeres me ha enseñado que nosotras tenemos que ser una sola voz ante la sociedad, en esta experiencia he contado con el apoyo incondicional de cada una de ellas en las reuniones y formaciones que hemos venido realizando; también he tenido la oportunidad de escucharlas, entenderlas y mirar el compromiso que tienen en el desarrollo de este proyecto.
Gracias a la firma del Acuerdo de Paz, hemos vivido estas bellas experiencias en el territorio, agradecemos a la Unión Europea y el Fondo Europeo para la Paz por el compromiso incondicional que han tenido para aportar a la sostenibilidad de este proyecto.
Igualmente, agradecemos a ACPO por todo el aporte y experiencia que nos han transmitido, son una organización ejemplo en el desarrollo social en los lugares más apartados del país; también resaltamos el importante aporte que viene dando La Diócesis de San Vicente como mediadora en las acciones que conducen a la construcción de la paz.
Por: Anyela Cardozo. Facilitadora del proyecto MIA.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.