Este modelo de biorrefinería ecológica fue diseñado por Juan Jacobo Jaramillo Obando, quien es integrante del Grupo de Investigación de Procesos Químicos, Catalíticos y Biológicos de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Manizales. Este proyecto tiene la intención de minimizar la contaminación que genera eliminar este residuo del procesamiento del arroz.
El estudiante Jaramillo mencionó que “se trata de un método de ciclo cerrado, es decir que se aprovechan los residuos de cada una de las fases del proceso, todos los subproductos tendrían un valor agregado o se podrían utilizar como materia prima en otros procesos industriales”.
En ese sentido, el proceso inicia con el secado de la cascarilla y seguidamente se pulveriza para facilitar su combustión, a continuación, se hace una gasificación la cual consiste en quemar el subproducto para obtener un gas, es decir, se requiere que el vapor obtenido no se forme con dióxido de carbono (CO2) y agua, sino con monóxido de carbono (CO) e hidrógeno.
Posteriormente, se purifican las cenizas en un filtro para separarlas del gas y luego en una caldera con agua se produce más vapor, el cual se mezcla con el anterior y así formar un solo gas, este vapor alimenta una turbina cuya potencia produce energía eléctrica.
Sumado a esto, la ceniza por contener calcio, sílice y fósforo, también se puede utilizar en el sector de la construcción para la elaboración de ladrillos. A su vez, el CO2 se está probando en el laboratorio como alimento para algas, con las cuales paralelamente se está trabajando en un proyecto para generar combustibles ecológicos. El investigador declara que el agua utilizada en dicho proceso tiene nutrientes, los cuales son benéficos para la siembra y el cultivo de estas.
Finalmente, Carlos Ariel Cardona, director del grupo de investigación, dijo que la cascarilla de arroz como modelo de biorrefinería es altamente eficaz en la sustentabilidad, a su vez, optimiza cada ciclo logrando subproductos amigables con el medio ambiente y ayuda a minimizar la contaminación.
Por: Luznery Barreto Duarte – Periodista.
Editor: Karina Porras Niño. Periodista – Editora.