El caserío de La Chipa se encuentra a cuatro horas vía carretera desde Puerto Rico y a cinco horas vía fluvial desde Cartagena del Chairá en Caquetá; tiempo que puede variar de acuerdo a las condiciones climáticas. Este recorrido lo hacía Lorena Reyes, facilitadora del proyecto Amazonía Joven, cada lunes y viernes con el fin de transmitir sus conocimientos en tecnologías a la comunidad.
En vista del inicio de la cuarentena por la Covid-19, el caserío de La Chipa se aisló por completo por el bienestar de sus pobladores. Teniendo en cuenta este panorama mundial, Lorena convocó a sus estudiantes a una sesión virtual, la cual contó con apoyo de uno de los maestros de la Institución Educativa Rural Villa del Río.
Entusiasmo por aprender
Con puntualidad llegaron los quince estudiantes, tanto del caserío, como los participantes de las fincas que viajan en sus caballos para recibir la formación. A pesar de las fallas de conectividad a Internet en un principio, los estudiantes guías que capacitó Lorena una semana antes, lograron entrar en contacto con su maestra por videollamada.
Le puede interesar: Amazonía Joven, educando desde el arte, la cultura, el deporte y la tecnología
“Se sintió de inmediato una emoción de todos ellos, pues para algunos era la primera vez que se comunicaban a través de videollamada. Esta experiencia virtual permitió que avanzaran en el curso de Alfabetización Digital”, comenta Lorena Reyes, Facilitadora de Amazonía Joven.
La clase tuvo como base la creación de correos electrónicos para los nuevos estudiantes vinculados antes del inicio de la cuarentena y el refuerzo para usar las herramientas del correo en el caso de todos los demás participantes. Creada cada cuenta, Lorena dio el paso a paso para que los estudiantes vincularan sus correos con el de la maestra.
Logrado con éxito este paso, ella se contactó con cada uno vía chat para enseñarles cómo compartir sus pantallas y mostrar sus avances en las actividades virtuales. Pero sobre todo, usar las herramientas que les ofrece el correo electrónico para enviar y recibir información, vincularse a programas educativos, pagar recibos, entre otras funciones.
“Revisamos sus cuentas, aprendieron a compartir sus pantallas. Al principio estaban nerviosos de cometer un paso mal en el proceso, pero todo resultó de manera positiva y fueron muy ágiles en seguir las indicaciones para navegar libremente. En momentos como estos, todo lo que han aprendido del curso lo han podido poner en práctica para conectarse con el mundo”, dice Lorena.
Compromiso con las comunidades rurales
Las clases virtuales no han podido continuar debido a que el colegio no está abriendo sus puertas por la pandemia o emergencia sanitaria. Sin embargo, la comunidad de La Chipa espera continuar con el proceso de formación; cumpliendo las medidas establecidas para la cuarentena y evitar así la propagación de la Covid-19. De esta manera, se podrá seguir contribuyendo a la educación de digital en zonas rurales y a la disminución de la brecha digital.
Mientras tanto, el proyecto Amazonía Joven, financiado por el Fondo Europeo para la Paz de la Unión Europea e implementado por CorpoManigua, Acción Cultural Popular – ACPO y la Diócesis de San Vicente del Caguán, reafirman su compromiso para continuar con los procesos de formación bajo nuevos modelos pedagógicos.
Por: Daimer Fernando Losada Bermeo. Comunicador proyecto Amazonía Joven en Caquetá.