viernes, noviembre 22, 2024
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La realidad del acceso al agua en zonas rurales de Colombia

Por lo menos 3 millones de los habitantes rurales de Colombia no cuentan con acceso a los servicios básicos de agua potable.

Por lo menos 3 millones de los habitantes rurales de Colombia no cuentan con acceso a los servicios básicos de agua potable, lo cual equivale al 28% de la población rural colombiana, según Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio. Personas víctimas del conflicto armado, con altos niveles de pobreza y pocas oportunidades, tienen que hacer frente a esta crítica realidad que sitúa a las comunidades en riesgo de enfermedades.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que la salud de las personas que consumen agua cruda, es decir que no ha sido sometida a proceso de tratamiento, empeora, ya que el ser humano no puede vivir sin agua. Actualmente existen más de 26 enfermedades por consumir agua en condiciones no óptimas, según la OMS. Es por esto que afecta dramáticamente el organismo provocando daños en el mismo y deteriorando la salud. Entre los padecimientos que causa, existe la Enfermedad Diarreica Aguda, la cual cobró en el 2015 la vida de más de 100 niños. 

Según Ministerio de Vivienda, Salud y Territorio, en el campo viven aproximadamente 11.653.673 personas; por lo menos 3 millones de esa cifra sin acceso a los servicios básicos de agua potable y más de la mitad sin acueductos y alcantarillados. La demora para garantizar la calidad de vida de los habitantes rurales en términos del agua, es histórica, porque no hay muchos avances en desarrollo para la construcción de acueductos y alcantarillados rurales que otorgue a los habitantes de zonas más vulnerables, la posibilidad de consumir agua potable para garantizar una vida digna. Además sin contar que son contextos sin acceso a educación, salud, empleo y demás derechos fundamentales.

Embajada de Suiza en Colombia – COSUDE y ASIR SABA

El panorama sobre el agua en zonas rurales es desalentador todavía. Sin embargo, existen organizaciones que trabajan por asegurar que las comunidades que enfrentan esta realidad, tengan un servicio básico de agua potable para el consumo humano. 

Las comunidades han tenido que tomar partido frente a esta circunstancia., construyendo acueductos comunitarios desde una lógica de integración de esfuerzos por mejorar la calidad de vida de todas las personas que habitan zonas en conflicto y sin plantas de tratamiento de agua. 

Frente a esta necesidad por mejorar las condiciones de vida de muchas personas, el derecho humano al agua y saneamiento básico; organizaciones como la Embajada de Suiza en Colombia – Ayuda Humanitaria y Desarrollo (COSUDE), quienes en 1996 desarrollaron el proyecto de agua SABA PLUS, lo implementan en Perú durante 21 años y  obtuvieron grandes resultados, en términos de garantizar a las comunidades la posibilidad de contar con agua tratada y consumible. En ese sentido, debido a los grandes problemas de desigualdad social y acceso limitado al agua en los territorios más periféricos de Colombia y por los resultados exitosos del proyecto SABA Perú, adaptan el modelo, nace ASIR-SABA y lo implementan en el país, para combatir la brecha de acceso al agua en zonas excluidas que han sido víctimas del conflicto armado.

El proyecto de Agua y Saneamiento Integral Rural ASIR SABA, ha promovido el desarrollo sostenible de la mano de comunidades que han gestado iniciativas locales de almacenamiento en sus territorios por mejorar su calidad de vida y vivir dignamente. Se proyecta para apoyar a construir paz en contextos de violencia, mejorando infraestructuras y cobertura de acueductos para que las comunidades de los municipios beneficiarios tengan acceso a un servicio básico de agua potable, ya sea por una red de distribución, local o secundaria.

Departamentos más afectados

A pesar que Colombia es uno de los países más ricos en recursos hídricos, la contaminación, la brecha en acceso de agua para todo el país y la pobreza, contribuyen a la desigualdad social que desfavorece a unos pocos. Es por esto que muchos departamentos se enfrentan a problemas de agua, especialmente Valle del Cauca, Nariño y Guajira tienen un riesgo alto, según IRCA – Calidad de Riesgo para la Calidad del Agua; por lo que las personas no deberían consumir aguas crudas. Pero, aun así, teniendo en cuenta que el agua es vital para la vida, deben tomarla de cualquier forma, incluso a riesgo de su propia salud. 

Son por estas razones, que acciones como las de la Embajada de Suiza, Ayuda Humanitaria y Desarrollo – COSUDE con el proyecto ASIR-SABA, son valiosas para contribuir a disminuir la desigualdad social, las injusticias y las brechas que se han gestado en estos territorios marginalizados históricamente por actores armados. El proyecto construye paz y mejora, a través de la articulación institucional, la vida de las habitantes rurales. 

En conclusión, el proyecto ASIR-SABA tiene un modelo de sostenibilidad que involucra a las comunidades en la toma de decisiones sobre el diagnóstico y la selección de tecnologías de agua y saneamiento más adecuados para los contextos del territorio. 

Por: Saira Alejandra Ramírez. Comunicadora proyecto ASIR-SABA.

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