En el departamento del Huila ubicado al suroeste del país se dio inicio a una nueva fase del proceso de conservación que busca la consolidación de un sendero ecoturístico que permita difundir a los visitantes la importancia del Caimán del Magdalena, una especie en peligro de extinción. Esto gracias al trabajo conjunto de un equipo conformado por biólogos, zootecnistas e ingenieros ambientales de la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena – CAM.
En colaboración con la comunidad del Desierto de la Tatacoa, este equipo realizó un recorrido en balsa a lo largo de 18 kilómetros por el río Cabrera, en jurisdicción del municipio de Villavieja. Con el que se pudo identificar los puntos de descanso, alimentación y anidación del Caimán.
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Así mismo, al ubicar los nidos de la especie estos fueron medidos y pesados con el propósito de monitoreo. Según explicó Katherine Arenas, bióloga de la CAM “ De acuerdo a los estudios realizados, existen por lo menos 23 individuos adultos que habitan y desarrollan su ciclo de vida en el área identificada como la Ruta del Caimán en el DRMI La Tatacoa”.
La iniciativa hace parte de un proceso comunitario que inició en el año 2014 cuando después de 30 años sin registro de la especie en el departamento del Huila, se reportó la presencia de crías del caimán en el Distrito Regional de Manejo Integrado La Tatacoa. Razón por la que las comunidades aledañas a las zonas de presencia del animal se unieron para conformar el Grupo de Monitoreo Comunitario Asoprocaiman. El cual busca conservar la especie amenazada por medio de seguimiento a nidos, cuidado y registro de los recién nacidos y el adelanto de un proceso de sensibilización constante.
La importancia del Caimán del Magdalena radica en que esta especie favorece la actividad pesquera y la salud de los cuerpos de agua en tanto se alimentan de animales enfermos que podrían afectar las poblaciones sanas. Adicionalmente, los aminoácidos contenidos en su excremento contribuyen al abonamiento de las aguas.
Por: Karina Porras Niño. Periodista.
Editor: Lina María Serna. Periodista – Editora.