Cormacarena, es la Corporación para el Desarrollo Sostenible Del área de Manejo Especial de la Macarena. Encargada de administrar los recursos ambientales de los 29 municipios del departamento del Meta. Junto a la Defensa Civil, liberaron el miércoles 13 de febrero a 1.500 tortugas terecay conocida científicamente como Podocnemsis unifilis.
Las tortugas, fueron incubadas y criadas en cautiverio, como parte de la estrategia para la conservación de esta especie liderada por las dos organizaciones mencionadas anteriormente. Este proyecto, desarrollado durante seis años con el apoyo de las comunidades, consiste en recolectar huevos de tortugas terecay en época de verano en las playas de los ríos Guayabero y Losada, con el fin de brindar protección y garantizar la reproducción de la especie.
Los huevos recolectados, son incubados en cubetas de área que simulan las condiciones de la playa y una vez han eclosionado, las crías son cuidadas durante su etapa de crecimiento. Etapa que tiene un tiempo de dos y un año; periodo en el que Cormacarena y las comunidades se encargan de cuidarlas y alimentarlas.
Con dos años de edad y en las condiciones apropiadas para la supervivencia en el hábitat natural, fueron devueltas al río Guayabero, sitio donde generalmente se reproducen de forma natural. Hasta la fecha, se han liberado 12.000 tortugas en 8 procesos.
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La tortuga terecay, es una especie amenazada. Pues se encuentra expuesta a una intensa sobreexplotación de los adultos y sus huevos. En algunos países su carne resulta más apetecible que la de otras especies; suelen ser atrapadas con anzuelos en épocas de pesca escasa.
Así mismo, su vistosa coloración la convierte en un animal muy llamativo para los mercados de mascotas. De acuerdo con la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), la Podocnemis unifilis se encuentra en la categoría Vulnerable a nivel global. Mientras que se le considera una especie en Peligro; en el Orinoco y En Peligro Crítico en el Amazonas.
En Puerto López, Meta; se llevó a cabo por parte de la misma entidad otro proceso de liberación. En dónde 36 animales silvestres, entre tigrillos, morrocos, chigüiros, erizos, armadillos, búhos, osos palmeros, iguanas, gavilanes, pericos carisucios y zarigüeyas regresaron a su entorno natural.
Los animales habían sido extraídos para ser comercializados, por lo que la entidad tuvo que rescatarlos y después de una valoración y rehabilitación por parte de profesionales del Centro de Atención y Valoración Cormacarena – Bioparque Los Ocarros, fueron llevados a Lagos de Menegua, ya que cumple con las condiciones ecosistémicas de hábitat necesarias para suplir los requerimientos biológicos de dicha fauna.
Por: Karina Porras. Periodista.
Editor: Lina María Serna. Periodista – Editora.
